A pesar de que la jornada del domingo se veía complicada para los europeos, comenzando el día 4-8 en el marcador, los dirigidos por
Bjorn Borg sacaron a relucir su mejor nivel cuando más importaba. Luego de la derrota de Medvedev, no había margen de error y tanto
Alexander Zverev como
Carlos Alcaraz jugaron un tenis sensacional, demostrando por qué son el n°2 y el n° 3 del mundo, liderando el triunfo del Team Europe en la
Laver Cup.
Europa vuelve a levantar el trofeo de la Laver Cup tras dos años de derrotas frente al Team World. En esta edición, y a pesar de la ausencia del n°1 del mundo, Jannik Sinner, los europeos trajeron a sus mejores jugadores, motivados para despedir a su capitán, Bjorn Borg, con una nueva victoria.
A pesar de contar con jugadores en excelente estado de forma y que lograron sorprender a las estrellas del viejo continente, el Team World no tenía en su alineación a ningún jugador dentro del Top 5 a nivel mundial, y esa falta de jerarquía y experiencia en momentos complicados terminó complicando sus aspiraciones.
Si bien es cierto que tras un viernes muy igualado, en la jornada del sábado los capitaneados por John McEnroe se hicieron fuertes sacando una importante ventaja, no tuvieron la sangre fría necesaria para terminar el trabajo.
Zverev resurgió de sus cenizas y venció a Tiafoe en una epopeya de 2 horas y media. El alemán supo resistir y contraatacar al estadounidense, que pareció quedarse sin energías en el super tie break. Fue una victoria super importante para el n°2, especialmente porque pudo celebrarlo con su público en Berlín.
Luego era el turno de Carlos Alcaraz. El español, ganador de 4 Grand Slams, salió a aplastar a
Taylor Fritz en el primer set. El finalista del US Open dió pelea en el segundo parcial, pero nuevamente Alcaraz ganó todos los puntos importantes, desmoralizando a su rival. Cuando le llegó el turno de cerrar el partido y el campeonato, al n°3 no le tembló el pulso y selló la victoria de su equipo.
El Team World fué un rival digno, poniendo en serios aprietos a los locales, pero finalmente las diferencias en el ranking se notaron.
Team Europe estuvo en los detalles, fue muy eficiente en sus ataques, redujo la cantidad de errores y golpeó en los momentos justos. Tanto Zverev como Alcaraz se mostraron súper enfocados y aprovecharon los bajones de sus rivales sin dar ventajas. Es un merecido triunfo para un excelente equipo.