Carlos Alcaraz ganó Barcelona Open del año pasado a pesar de caerse por las escaleras antes de su partido de semifinales, lo que le impidió terminar el calentamiento.
El Conde de Godó del año pasado fue toda una experiencia para Alcaraz, como reveló este año. Debía jugar la semifinal el sábado, pero a causa de la lluvia tuvo que hacerlo el domingo. Ese día disputó dos partidos: la semifinal y la final. Antes de la semifinal, Alcaraz se cayó por las escaleras, lo que le sembró dudas sobre el partido:
"No, por la adrenalina, cuando estás jugando, te olvidas de todo y estás concentrado en jugar. Por supuesto, con mi médico y mi fisio me hicieron algunas cosas para ayudarme a no sentir el dolor. Ahora tengo mucho cuidado cuando estoy en las escaleras".