La finalista del Open de Canadá se salta Cincinnati para llegar en forma al último Grand Slam del año

Amanda Anisimova ha vivido una semana mágica, la mejor de su corta carrera hasta ahora, pero ha tomado la decisión de no competir en el Cincinnati Open después de jugar dos torneos consecutivos para llegar en el mejor estado de forma posible al US Open, el último Grand Slam del año, el de casa y donde podrá tener una oportunidad de brillar si sigue jugando así.

Anisimova llegó a cuartos de final en Washington desde la fase de clasificación y luego alcanzó la final del Abierto de Canadá. Por ello, ha jugado muchos partidos en las dos últimas semanas.

Así lo explicó en las redes sociales. La jugadora de 22 años dijo que su cuerpo no puede rendir como ella quiere, por lo que ha decidido no jugar esta semana. Pero de todos modos ha tenido éxito en múltiples misiones.

"Hola a todos desafortunadamente tengo que retirarme de Cincinnati. He jugado muchos partidos esta semana y mi cuerpo no me deja competir a tope", escribió en Instagram en un comunicado en su historia. "Echaré de menos a todos los fans y espero veros el año que viene".

Recibió una wildcard para el US Open junto a Learner Tien tras acumular puntos antes de la fecha límite. Tampoco tendrá que depender de ese sistema en el futuro. Ahora, por primera vez en más de un año, vuelve a estar entre las 50 mejores.

Anisimova llegó a la final la semana pasada en Toronto, donde perdió ante Jessica Pegula en lo que fue una semana impresionante para la ex número 21 del mundo y la vio despuntar de nuevo. Anisimova se mostró prometedora, como ha hecho a menudo en los últimos años, antes de que la salud mental y el cansancio se cebaran con ella y decidiera abandonar el deporte durante un tiempo. Ahora está de vuelta y mejor que nunca.