Como cada vez que juega
Rafael Nadal en España, una serie de personalidades se congregaron para ver jugar a la mayor leyenda de la historia del tenis español. Melendi (cantante), Dani Carvajal y Joselu Mato (jugadores del Real Madrid Club de Fútbol), Raúl González Blanco (histórico futbolista español), Feliciano López (director del
Madrid Open), Dani Martínez (presentador de televisión), Alejandro Blanco (director del Comité Olímpico Español) o José Luis Martínez Almeida (alcalde de Madrid), entre otros, estuvieron presentes.
Nadal no tuvo absolutamente ningún reparo en arrollar a
Darwin Blanch, joven promesa de la ATP de 16 años, por 6-1 y 6-0. El estadounidense no tuvo ninguna respuesta para el juego del español, que se paseó por la pista y demostró su dominio en cada momento del partido.
Se ve que Blanch tiene cosas de posible futura estrella, tiene un saque imparable pero quizá la tierra batida no sea la superficie que más le beneficie a sus características. Se espera que sea más un jugador de pista rápida, como la gran mayoría de los tenistas del continente americano.
Se vio un Blanch nervioso desde el primer punto, como era de esperar en un chico de 16 años que se enfrenta a todo un mito del deporte que practica. Apenas pudo ganarle un juego en el primer, con su servicio, evidentemente. Nadal no le dio opciones al resto y estuvo letal cuando se trataba de convertir las suyas.
El segundo set no fue muy diferente, con el pequeño cambio de que aquí Nadal no le dejó ni siquiera las migajas. En segunda ronda se enfrentará ahora a Alex de Miñaur, un desafío tremendamente mayor. El australiano lo batió la semana pasada en el Conde de Godó por 7-5 y 6-1.
Tras un primer set disputado, el número 11 del mundo estuvo intratable en el segundo. Sabiendo que Rafa no puede jugar más de dos horas y media a máxima intensidad, dicho por él, tendrá que tratar de arrebatarle el primer set en esta ocasión y ver lo que pasa después.