El
Masters de Roma es el próximo capítulo del regreso de
Rafael Nadal a la tierra batida después de su larga lesión. En el último año de su carrera, el manacorí ha conseguido competir en el Conde de Godó y el
Madrid Open, y de manera más que notable.
Antes de Roma, Nadal ha hablado sobre lo motivado que se encuentra por afrontar el ATP 1000 de la capital italiana, aunque también se ha mostrado precavido respecto a su presencia en
Roland Garros. Sin embargo, cuenta que todo lo que ha logrado hasta ahora no estaba dentro de las expectativas.
"Cada vez estoy mejor, tanto física como tenísticamente. Estoy aquí para dar lo mejor de mí mismo. Todos los partidos son ahora más difíciles e imprevisibles para mí que en el pasado, sobre todo en tierra batida. Pero las perspectivas son buenas si sigo trabajando de la manera correcta y si mi cuerpo me lo permite", declaró Nadal según Lapresse.
"Por supuesto que hay altibajos, y cambia de un día para otro, he tenido momentos difíciles en Madrid, aquí también desde mi llegada, pero mi 'curva' en general va hacia arriba, es obvio. Estoy contento con el nivel que tengo ahora, hace un mes era casi imposible que pudiera pensar en jugar en Barcelona".