Emma Raducanu se declara adicta a la adrenalina y, como de niña le encantaban las carreras, tuvo la oportunidad de probar un simulador de Fórmula E en Stuttgart.
Raducanu es embajadora de Porsche y tuvo la oportunidad de visitar la sede de la empresa durante su estancia en la ciudad con motivo del
Porsche Tennis Grand Prix. Fue un día lleno de acontecimientos para la británica, mucho más que su día en la oficina porque fue derrotada con bastante facilidad en la primera ronda del evento.
En la sede, Raducanu tuvo la oportunidad de probar un simulador de Fórmula E, lo que le resultó muy divertido, ya que creció y sigue viendo la Fórmula Uno con regularidad. Hablando de su experiencia:
"Hoy la experiencia en Porsche ha sido muy divertida. Dar una vuelta por el Centro de Desarrollo ha sido muy interesante. Para mí, meterme en el simulador ha sido toda una experiencia. Sinceramente, no podía creer lo diferente que era a estar en un coche normal en la pista. Respeto mucho a los pilotos que se meten en el simulador y se lo toman con naturalidad y tranquilidad".
Preguntado por la similitud entre el automovilismo y el tenis, Raducanu explicó:
"Tienes la competición, la adrenalina y los momentos de presión. Y tienes que tomar una decisión que puede ser decisiva en muy poco tiempo".