John McEnroe, sobre la lamentable actitud de Andrey Rublev en su eliminación de Roland Garros: "Si se pasó de la raya es irrelevante"

ATP
sábado, 01 junio 2024 en 11:39
rublevmeltdown
Andrey Rublev sufrió una frustrante derrota en sets corridos ante Matteo Arnaldi, con un marcador de 7-6, 6-2 y 6-4, el pasado viernes en Roland Garros. La reacción emocional del ruso no pasó desapercibida, especialmente para John McEnroe, conocido por su propio temperamento volcánico durante su carrera.
Rublev entró a Roland Garros con altas expectativas, especialmente después de ganar su segundo título de Masters 1000 en Madrid a principios de mayo. Sin embargo, su actuación en París fue una decepción. Tras dos victorias convincentes en las primeras rondas, su juego se desmoronó contra Arnaldi, un oponente que aprovechó cada oportunidad para llevarse el partido.
Durante el encuentro, Rublev mostró una serie de arrebatos emocionales, incluyendo romper su raqueta y gritar en varias ocasiones. Este comportamiento llamó la atención de McEnroe, quien en una reciente entrevista destacó que Rublev había cruzado una línea personal en términos de manejo de sus emociones.
"Si cruzó o no una línea es irrelevante en este momento", dijo McEnroe. "No creo que se haya pasado de la raya; se ha pasado de la raya por sí mismo. Te lo dice alguien que sabe lo que es volverse loco: si te vas a volver loco, tienes que saber cuándo tienes que retirarte para poder mantener la concentración y jugar bien. Si te ayuda, como me pasó a mí a menudo, sigues haciéndolo hasta que te dicen: 'Una más y estás fuera'".
Rublev es conocido por llevar sus emociones a flor de piel, algo que McEnroe considera una característica que puede ser tanto una ventaja como una desventaja. "He visto a Rublev volverse loco antes. No es la primera vez. Es un tipo que lleva sus emociones a flor de piel. Cuando Andrey tenía 15 o 16 años, mi agente, Gary Swain, me dijo: 'Tienes que entrenarlo'. En cierto modo, creo que tenía razón. Estábamos hechos el uno para el otro", reflexionó McEnroe.