Cameron Norrie disputaba en el
Moselle Open su primera final ATP desde febrero de 2023, cuando le ganó a un
Carlos Alcaraz medio lesionado en el Rio Open. Sin embargo, no pudo con un Benjamin Bonzi que está a un nivel estratosférico últimamente y ha levantado su título de 250 número uno tras derrotar al británico por 7-6(6) y 6-4.
Norrie, que ha luchado contra las lesiones y ha caído en picado en la clasificación, ha tenido su mejor semana en mucho tiempo. Volvió por primera vez desde que perdió ante Rafael Nadal en Nordea para jugar un Challenger en Roanne.
Allí alcanzó los cuartos de final, pero en Estocolmo y Viena fue eliminado en primera ronda. En la fase previa de París, fue derrotado por Quentin Halys en primera ronda. No fue la mejor preparación. Sin embargo, en Metz hizo un buen papel.
Derrotó a Roberto Carballés, Luca van Assche, Zizou Bergs y Corentin Moutet en unos duros enfrentamientos para alcanzar la final. Pero fue derrotado por Bonzi, que ha ganado 21 de sus últimos 22 partidos. Siete sólo esta semana tras superar la fase previa.
En particular, el primer set fue frustrante para Norrie, ya que desaprovechó 13 puntos de ruptura y Bonzi se hizo con él por 7-6(6) para colocarse en cabeza del torneo indoor. En el partido, que duró poco menos de dos horas, Norrie sufrió una rotura al comienzo del segundo set, cuando Bonzi se puso 2-1 arriba. Bonzi se puso 4-2 arriba y 5-3 abajo, mientras Norrie era incapaz de poner en apuros su saque.
Bonzi sacó 6-4. De estar a punto de perder contra Alex Michelsen, que sacaba por debajo del brazo y estaba lesionado, a derrotar a Norrie, ha sido una semana increíble para él. Mientras Norrie termina el año en positivo. Algo de consuelo tras apenas ganar un partido en todo 2024.