Emma Raducanu estuvo a punto de comenzar una espiral descendente cuando se lesionó en el ASB Classic de Auckland, pero a pesar de ello sería bienvenida para jugar el torneo y comenzar su regreso en 2024.
Un torneo de preparación clave para el Abierto de Australia, ya que es uno de los primeros de la temporada, en el que jugadoras de la talla de Naomi Osaka y Angelique Kerber podrían luchar por conseguir wildcards.
Pero Raducanu también está trabajando para volver y, a pesar de que se resbaló en la pista y se torció el tobillo, lo que hizo que la campeona del US Open se quejara en la pista, el director del torneo, Nicolas Lamperin, no descarta su regreso.
Aunque con la salvedad de que Raducanu aún no ha fijado completamente su regreso, lo que significa que, en su mente, ha puesto sus miras en otras jugadoras que es más probable que regresen, lo que podría suponer un comodín para Osaka, Kerber o incluso Caroline Wozniacki, que no jugará hasta 2024 a pesar de un regreso exitoso.
Esta lesión de tobillo fue una de las muchas del año pasado y de la que ha sido operada desde entonces, lo que provoca la polémica, pero la puerta sigue abierta.
"Ha habido algunas, pero es pronto para decirlo, porque aún no tenemos una fecha fija de regreso. La puerta está abierta si quiere venir, pero hemos tenido que ir a por otros jugadores, con los que tenemos más certezas. No está fuera de la mesa, pero necesitaríamos más tiempo, porque aún no sabemos cuándo va a volver", dijo Lamperin en una entrevista con Stuff.
