La rusa
Mirra Andreeva prolonga su buen momento al remontar su partido contra
Jasmine Paolini en lo que fue una verdadera batalla por los octavos de final del
Cincinnati Open. Andreeva, de tan sólo 17 años, derrotó a la subcampeona de Wimbledon por 3-6, 6-3 y 6-3. Se verá las caras contra
Iga Swiatek en cuartos.
La joven rusa ha alcanzado los cuartos de final de un WTA 1000 por segunda vez en su carrera. La primera vez fue hace un par de meses en el Abierto de Madrid, donde cayó ante Aryna Sabalenka en sets corridos. Esta vez, se enfrentará a la número 1 del mundo, Iga Swiatek.
Andreeva confirma su buen momento
Andreeva (nº 24) comenzó con un break, pero Paolini (nº 5) lo recuperó rápidamente en el juego siguiente. La italiana se puso por delante en el sexto juego (4-2), lo que le bastó para asegurarse el set con un 6-3.
Al principio, Paolini encontró soluciones al potente saque de la adolescente, pero en el segundo set, la rusa añadió más variedad a su juego. Andreeva registró unas impresionantes estadísticas de saque en el segundo set, con el 65% de sus primeros servicios y el 94% de los mismos ganados (16/17). Por el contrario, Paolini tuvo problemas, ya que sólo logró el 59% de sus primeros saques y ganó el 47% de ellos.
Andreeva mantuvo la presión sobre el saque de Paolini, a pesar de que la italiana conseguía mantener su servicio en circunstancias difíciles. Sin embargo, Mirra Andreeva consiguió un break en el octavo juego y cerró el set por 6-3, forzando así un segundo set.
El final fue totalmente favorable a Andreeva, que logró sendas roturas en el primer y quinto juegos. Aunque Paolini recuperó uno de los breaks, no fue suficiente para remontar, ya que perdió su servicio por tercera vez consecutiva. A pesar de salvar un punto de partido, Paolini acabó sucumbiendo, y Andreeva se impuso por 3-6,6-3 y 6-3 para avanzar a cuartos de final, donde se enfrentará a la número 1 del mundo, Iga Swiatek, con la que no tiene enfrentamientos previos.