Las lágrimas de una semifinalista de Wimbledon y medallista olímpica en pleno partido en el Stuttgart Open

En el Stuttgart Open, la emoción y la tensión se apoderaron del debut de Donna Vekic, quien volvió a enfrentarse a los fantasmas de las lesiones en una derrota tan dolorosa como simbólica. La número 20 del mundo abandonó la pista entre lágrimas tras caer ante su compatriota Jana Fett, número 127 del ranking y proveniente de la fase previa, por 7-6(2) y 6-4.

A sus 29 años, Vekic ha sido muchas veces una guerrera contra su propio cuerpo. Las lesiones han amenazado repetidamente con cortar de raíz una carrera que, sin embargo, ha estado llena de momentos brillantes. Ella misma ha admitido que consideró la retirada en más de una ocasión. Aunque en 2024 parecía haber superado esos obstáculos, el 2025 ha sido cruel: una marca de 5-10 refleja la dureza de este tramo.

El encuentro en Stuttgart comenzó con promesa para Vekic, que tomó el control inicial con un sólido 4-1 en el primer set. Pero Fett, tenaz y sin complejos, fue encontrando su juego. Con temple y precisión, la jugadora de la fase previa remontó el set y lo cerró en el tiebreak.

Lo más duro, sin embargo, vendría en el segundo set. En un momento de máxima tensión, con Fett liderando 2-1, Vekic pidió atención médica. Las cámaras captaron un instante estremecedor: visiblemente emocionada, llorando en el banquillo, mientras los médicos revisaban sus constantes vitales. Una escena que hablaba de dolor físico, sí, pero también de una carga emocional abrumadora.

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A pesar de todo, Vekic regresó a la pista. Su espíritu competitivo le impidió abandonar. Pero el cuerpo no acompañó: dos breaks consecutivos la dejaron 5-1 abajo. Aunque mostró algo de lucha en los últimos juegos, la remontada no se materializó. Jana Fett, con sangre fría, cerró el partido y firmó una de las sorpresas del torneo.

Este fue el primer partido de Vekic en tierra batida desde su impresionante actuación en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde alcanzó la final tras vencer a estrellas como Coco Gauff y Bianca Andreescu. Aunque allí perdió el oro frente a Zheng Qinwen, su campaña olímpica fue una de las mejores de su carrera.

En contraste, Fett celebró su victoria con discreción pero con la dignidad de quien ha superado sus propios retos para ganarse un lugar en la segunda ronda, donde enfrentará a la número 2 del mundo, Iga Swiatek.