Iga Swiatek, en plena forma, se impuso a
Elena Rybakina en sets corridos por 7-6 y 6-2 y se adjudicó el
Qatar Open por tercer año consecutivo. Sin embargo, a pesar de no haber perdido ni un set en toda la semana, Swiatek no llegaba al torneo con confianza después de perder contra Linda Noskova en el Open de Australia y pensó que iba a perder pronto.
Sorana Cirstea, Ekaterina Alexandrova, Victoria Azarenka y la retirada de Karolina Pliskova la dejaron fuera antes de derrotar a Rybakina, que este año es la jugadora más dominante del circuito por victorias y títulos, junto a Jelena Ostapenko. Pero no se deja llevar demasiado por esta última victoria y afirma que no tiene objetivos ni títulos en mente.
"Pensé que iba a perder aquí en segunda ronda", dijo Swiatek. "No me sentía muy confiada antes del torneo. Tampoco tuve un tiempo tranquilo en casa para centrarme sólo en trabajar, así que no esperaba mucho. Y entonces, ya sabes, sentí que si vas a dar el 100% y trabajar duro, las cosas buenas pueden llegar".
"Yo no diría que un torneo es un objetivo específico para mí, porque al final, me sentí orgulloso de cada una de mis temporadas sin importar el torneo que gané o lo que pasó", dijo Swiatek. "Simplemente te alegras de poder superar los obstáculos y trabajar duro. A veces los títulos son más para Wikipedia que para ti, pero esta temporada, sí, me lo estoy tomando con calma, paso a paso y semana a semana".
Pero un aspecto que sí estresa a Swiatek es la etiqueta de tricampeona y ganarla tres años seguidos, bromeó: "Dios mío, chicos. No sabéis lo difícil que fue no pensar en ello. Llegué aquí y estaba bastante estresada porque sentía las expectativas. Quería hacerlo todo paso a paso, como siempre. Estoy muy contenta. Estoy muy orgullosa de mí misma".