"Espero que mañana no sea peor": Elena Rybakina hace saltar las alarmas tras alcanzar la final en las WTA Finals

Elena Rybakina reservó su plaza en el partido por el título de las Finales de la WTA 2025 tras una tensa victoria en semifinales, imponiéndose a Jessica Pegula en uno de los encuentros más dramáticos de la semana.

Tras la victoria, la kazaja admitió que, aunque el partido fue emocionante para los espectadores, desde su lado de la red fue mucho más angustioso. Se impuso a Pegula remontando un set en contra.

Perdió el primero por 6-4, pero remontó y jugó una partida de ajedrez en la pista, logrando imponerse a Pegula en la recta final con roturas de saque y aprovechando los errores de su rival. Sin embargo, pasó de ser una incorporación tardía a estar en camino de ganar el título y a un partido de conseguirlo.

"Depende del momento, por supuesto", respondió Rybakina con una sonrisa cuando se le preguntó si disfrutaba con batallas tan intensas. "Algunos rallies fueron una auténtica locura, ¡y algunos los gané yo! Así que sí, se disfruta un poco, pero al mismo tiempo hay muchos nervios. Cuando el marcador está tan ajustado, no es fácil. Me alegro de haber conseguido mantener la concentración y ganar".

La número 4 del mundo, que ha estado jugando con molestias visibles, volvió a lucir un fuerte vendaje en el hombro durante el partido. Preguntada por su estado físico, Rybakina admitió que la recuperación se ha convertido en un acto de equilibrio al final de una larga temporada. Esto hace saltar las alarmas, ya que se prepara para enfrentarse a una Sabalenka hambrienta de poderío o a una maestra de la táctica como Amanda Anisimova. Ambas se aprovecharán si Rybakina no está al 100%. Algo sobre lo que tendrá que reflexionar con su equipo antes del duelo de mañana.

"Espero poder recuperarme para mañana", dijo. "Han sido muchos partidos, y además sirvo mucho, así que he tenido que adaptarme un poco. Por ahora, me estoy esforzando; queda un último partido, así que intentaré hacer todo lo posible con el equipo para recuperarme. Al mismo tiempo, no queremos empeorar las cosas antes de la pretemporada. Veremos cómo va, pero por ahora me las he arreglado, y espero que mañana no vaya a peor".

Rybakina, que ya es campeona de Grand Slam, tiene ahora la oportunidad de añadir a su colección el prestigioso trofeo de las Finales de la WTA, un premio que hasta ahora se le ha resistido pese a sus constantes éxitos en los grandes escenarios.

"Sería increíble, por supuesto", reflexionó. "No es nada fácil perder en una final, aunque hayas llegado hasta el final. Pero hay muchas rivales difíciles, y gane quien gane este partido, va a ser una batalla muy dura. Intentaré hacerlo lo mejor posible, darlo todo, y ya veremos qué pasa".

Con un último reto por delante, Rybakina confía en que la serenidad que la caracteriza y su potente saque le permitan conquistar uno de los títulos más importantes de su carrera y terminar la temporada por todo lo alto.