Emma Raducanu admitió su mal rendimiento en el partido que fue vapuleada por 6-0, 7-6 ante Anhelina Kalinina en 1ª ronda del
Qatar Open, pero igualmente ha sido criticada en las redes sociales por dar prioridad a sus patrocinios después de llegar a Doha el domingo tras asistir a una glamurosa inauguración la noche anterior a la que también asistieron la modelo Naomi Campbell y la actriz Vanessa Hudgens.
Raducanu, cuyo valor de ganancias se estima en 12 millones de libras, sólo superada por Iga Swiatek en términos de riqueza según Forbes y técnicamente la primera en términos de comerciabilidad, ya que esta última obtuvo la mayor parte de su fortuna gracias a sus victorias en torneos, asistió el sábado por la noche a la inauguración del hotel One&Only One Za'abeel de Dubai.
En el pasado ha calificado de injustas las críticas sobre sus compromisos de patrocinio, pero como señalaron los aficionados al tenis en las redes sociales, así como en otras publicaciones, pareció tener un impacto en sus preparativos para Doha, ya que no estuvo a la altura contra Kalinina en el WTA 1000, sin apenas entrenar debido a los retrasos por la lluvia y llegando tarde.
No intentará jugar en el Dubai Duty Free Tennis Championships, ya que su clasificación es demasiado baja para jugar siquiera la fase de clasificación y necesita una wildcard. En su lugar, es probable que regrese en Indian Wells y Miami, y también está inscrita en el ATX Open de Austin. Su derrota ante Kalinina estuvo plagada de errores y fue el primer indicio de que tal vez necesite volver a la mesa de dibujo e incluso disputar partidos de la ITF para adquirir práctica y también rechazar más compromisos con el fin de afianzarse de nuevo en el juego.
"Creo que tengo que programar mejor mis torneos e intentar jugar más partidos", declaró en Sky Sports. "Creo que me voy a ir a casa a entrenar y ya veremos qué pasa a partir de ahí".