El ex entrenador de
Emma Raducanu, Andrew Richardson, que la guió hasta la victoria en el US Open, ha revelado lo que ocurrió cuando se separaron sorprendentemente tras el enorme éxito de la tenista británica.
Muchos se quedaron atónitos cuando Raducanu dejó marchar a su entrenador Andrew Richardson, que trabajaba con ella cuando ganó el US Open. Nadie entendía por qué había tomado esa decisión, pero Raducanu quería un entrenador con más experiencia en el circuito WTA que la ayudara a aclimatarse a la vida profesional.
Aún no ha vuelto a encontrar ese nivel, ya que su carrera ha ido en caída libre debido sobre todo a la mala suerte de las lesiones y a un juego en general mediocre.
Richardson aclara ahora cómo se produjo la ruptura: "El hecho es que tenía un contrato de prueba de nueve semanas que tanto Emma como yo consideramos una buena idea para ver cómo nos llevábamos, y que duró hasta el final del US Open, cesando inmediatamente después. Hubo un período de tiempo después de que
cuando yo estaba dispuesto a renegociar el contrato. Quería continuar, y
tenía un plan que quería poner en marcha para Emma. Eso de que
quería ir a 'entrenar a mi hijo' no es cierto, pero parece que se dice todo el tiempo".
Y continuó: "Después de probablemente diez días o dos semanas
(tras el US Open) no tenía contrato. Estábamos hablando de renegociar y entonces recibí una breve llamada de su agente diciéndome que
me dijo que iban a cambiar de rumbo, y ahí se acabó todo. Fin. Desde lo que pasó con
Emma, he recibido ofertas para volver al circuito, tanto de la WTA como de la ATP. El momento no era el adecuado, pero volver al circuito es algo que quiero hacer en el futuro".