Chris Evert y
Martina Navratilova han mandado una carta a la WTA intentando que las Finals no se disputen en Arabia Saudí.
A pesar de que aún no se ha anunciado, parece inevitable que las Finales de la WTA se celebren en Riad este año, a pesar de las dudas sobre su historial en materia de derechos humanos, leyes contra las mujeres y, en particular, contra la comunidad LGBTQ+, que está criminalizada. El dúo calificó el posible traslado a Riad de "importante paso atrás".
Los dos amigos íntimos, que son dos de los mejores tenistas de todos los tiempos, escribieron a Steve Simon, a otros miembros de la junta directiva y a los Consejos de Jugadores y Torneos para que, como mínimo, entablaran un debate transparente antes de tomar una decisión definitiva. Esto se ha producido después de que en la última jornada se confirmara a Rafael Nadal como nuevo embajador de la Federación Saudí de Tenis, algo sobre lo que la número uno del mundo de la WTA, Iga Swiatek, tenía dudas en su caso debido al malestar que sienten las mujeres en esos ámbitos, pero muchos han visto la medida como "inevitable" mientras Evert y Navratilova pretenden plantar cara.
"La WTA se fundó sobre la equidad y la igualdad para empoderar a las mujeres en un mundo dominado por los hombres. En resumen, la WTA debería representar valores que contrastan con los del Reino de Arabia Saudí. No sólo es un país en el que las mujeres no son consideradas iguales, sino que criminaliza a la comunidad LGBTQ", escribió el dúo según Sports Illustrated.
"Un país cuyo largo historial en materia de derechos humanos y libertades básicas ha sido motivo de preocupación internacional durante décadas. Llevar las finales de la WTA a Arabia Saudí supondría dar un importante paso atrás, en detrimento de la WTA, del deporte femenino y de las mujeres. Pedimos a la WTA que reflexione sobre todas estas consideraciones", añadieron.