Caroline Wozniacki parecía tener un as en la manga, por así decirlo, durante su victoria sobre Leylah Fernández, ya que con el horario prácticamente completo y la oscuridad descendiendo sobre
Wimbledon, se vio obligada a cambiar de pista a mitad de partido.
Wozniacki, ex número 1 del mundo, se impuso por 6-3, 2-6 y 7-5 en una victoria en la que echó por tierra su deseo de obtener una wildcard antes del torneo y demostró que hay algo de vida en su regreso. Ahora se enfrentará a Elena Rybakina.
Pero tal vez la historia habría sido diferente si no se hubiera cumplido su deseo en primer lugar. Pasó casi media hora pidiendo al árbitro que suspendiera la contienda cuando el partido estaba empatado a 3-3. Sus deseos se cumplieron poco antes de las nueve de la noche. Sus deseos se cumplieron poco antes de las 9 de la noche.
Pero en lugar de conseguir la suspensión de la contienda que ella quería que se jugara al día siguiente, los organizadores pensaron en la fuerte lluvia que caería el viernes y decidieron trasladarla a la Pista Uno. Al no haber lluvia el jueves debido al partido de dobles masculino en la Pista Central, en el que quizás se habría disputado el Wozniacki-Fernández, los organizadores pudieron cambiar la fecha.
También causó estragos para Wozniacki, que tiene a sus hijos con ella. Tuvo que utilizar su teléfono durante la suspensión para llamar a su niñera y que cuidara de los niños hasta que ella regresara, en una acción sin precedentes. Salieron bajo techo casi una hora después. Wozniacki se aseguró de que tampoco llegaran al toque de queda.
Salvó dos bolas de partido antes de derrotar a la canadiense. Pensó que era la decisión correcta cambiar de sede. Pero tal vez habría pensado de otra manera si hubiera perdido o estuviera en el lugar de Fernández como jugadora derrotada. Quería terminar el partido, ganara o perdiera. Quería terminarlo hoy porque se supone que mañana puede llover. Pensé que era muy difícil ver el exterior. No sabía que existía la posibilidad de jugar en la Pista 1 o en la Central, pero cuando se presentó la oportunidad, me pareció genial".