¡Ni Nadal, ni Djokovic, ni Federer! La mayor estrella de la historia del tenis según Chris Evert

Chris Evert es una de las mayores leyendas de la historia del tenis. En su palmarés cuenta con 18 títulos de Grand Slam, de 157 totales, 7 en Roland Garros (récord femenino), llegó al menos a semifinales en 54 de los 56 torneos grandes que jugó y tiene un impresionante récord de 90% de victorias en 1.455 partidos jugados. Por lo tanto, es una persona más que autorizada para hablar del deporte.

Según la estadounidense, la mayor estrella de la historia del tenis es Bjorn Borg, por el que las chicas se peleaban y parecía más un miembro de los Beatles que un deportista. El sueco también tiene un palmarés envidiable, con 66 trofeos, 11 de ellos de Grand Slam y 6 en París. Un dato completamente surrealista si tenemos en cuenta que se retiró ¡con apenas 26 años!

Ambos fueron varias veces campeones de Grand Slam y ganaron su mayor número de títulos en la tierra batida de Roland Garros. Según el estadounidense, Borg sigue siendo la mayor estrella del tenis, a pesar de la aparición de jugadores como Roger Federer, Rafael Nadal, Serena Williams y Novak Djokovic.

Borg ganó seis títulos del Abierto de Francia entre 1974 y 1981. Durante 30 años, el sueco fue el campeón más prolífico del torneo, y superar su récord parecía casi imposible hasta la aparición de Rafael Nadal. El español empató a Borg con su sexto título en 2011 y desde entonces ha alcanzado el casi irreal total de 14 títulos en Roland Garros. Sin embargo, Borg, 11 veces campeón de Grand Slam, se convirtió en una leyenda con Roland Garros como escenario ideal.

Asimismo, la estadounidense Chris Evert es la campeona femenina más laureada de la historia del Abierto de Francia, con siete títulos entre 1974 y 1986. Chrissie también brilló en París, y sólo Steffi Graf se acercó a su récord, con seis títulos. Con todo, tanto Borg como Evert pueden considerarse los mejores jugadores del Abierto de Francia después de Rafa Nadal, a la espera de lo que haga Iga Swiatek en su carrera.

Evert y Borg conversaron con el New York Times para recordar sus mejores años en Roland Garros, durante las décadas de 1970 y 1980. La estadounidense recordó que entonces se hablaba poco del tenis femenino y todo giraba en torno al masculino, donde Borg era la gran estrella.

"En París estaban un poco atrasados en cuanto a la igualdad, la liberación de la mujer y la celebración de las deportistas. Todo giraba en torno al tenis masculino. Y Bjorn era como una estrella de rock, como uno de los Beatles. Tenía que tener guardias de seguridad a su alrededor".

"Las chicas gritaban y lloraban e intentaban agarrarse a él. Nunca había visto a nadie idolatrado como él. A día de hoy, creo que sigue siendo el mayor ídolo que ha tenido nunca el tenis", dijo Evert.

Por otra parte, Borg elogió a Evert, afirmando que se sentía orgulloso de la 18 veces campeona de Grand Slam y de sí mismo como pioneros del revés a dos manos, mientras que la mayoría de los jugadores aún utilizaban el revés a una mano: "Creo que introdujimos en el mundo nuestra forma de jugar. A Chrissie y a mí nos gustaba jugar desde el fondo de la pista. Teníamos revés a dos manos, y no muchos jugadores lo hacían", dijo Bjorn Borg.

El ex jugador sueco también recordó su nerviosismo al llegar a la final del Abierto de Francia de 1974, donde ganó su primer título. Borg recordó que no era favorito para ganar el torneo, pero logró llegar a la final contra el vigente campeón del US Open, Manuel Orantes: "Antes del torneo diría que no era el favorito para ganar. Me sorprendí a mí mismo al estar en mi primera final de Grand Slam".

"Yo estaba un poco nervioso, pero creo que él sintió más presión que yo. Además, estaba muy cansado. Cuanto más jugábamos, más cansado estaba y más presión sentía", añadió el ex número 1 del mundo.