Esperando el US Open: Dos partidos polémicos para recordar en Flushing Meadows

En el US Open se han dado algunos de los partidos más controvertidos de la historia del tenis. Un público ruidoso, jueces de silla temperamentales, el calor y la húmedad de Nueva York, y jugadores que a ésta altura de la temporada llegan bastante cansados han sido los ingredientes de un cóctel que como veremos a continuación, muchas veces ha sido explosivo.

En la final del US Open 2018, Serena Williams fue sancionada por comportamiento antideportivo durante el partido contra la japonesa Naomi Osaka. Williams discutió con el árbitro, en reiteradas ocasiones. La situación escaló hasta que se le dio una penalización que afectó directamente el resultado del partido, con Osaka ganando su primer título de Grand Slam por 6-2 y 6-4, en un ambiente donde la tensión era total.

Serena recibiría su primer advertencia tras comunicarse con su entrenador, algo que no fue tomado de buena manera por la menor de las hermanas Williams. Con el encuentro avanzando y ante un resultado adverso, Serena rompió su raqueta, lo que le valió un punto de penalización. Finalmente, tras llamar "ladrón" al árbitro, recibió una penalización de un juego, llevando su frustración al máximo nivel y desembocando en un intercambio acalorado con Carlos Ramos, en el que acusó al árbitro de sexismo, sugiriendo que nunca había sancionado a un hombre de la misma manera.

Quien se la llevó de arriba fue la pobre Osaka, víctima de los continuos abucheos del público estadounidense al momento de recibir el trofeo, entre lágrimas que reflejaban una tristeza que hasta el día de hoy recuerda.

En el US Open 2020, Novak Djokovic fue descalificado del torneo después de golpear accidentalmente a una jueza de línea con una pelota durante su partido contra Pablo Carreño.

El serbio y el español se vieron las caras en los octavos de final del torneo, y con el encuentro 6-5 en favor de Carreño Busta en un disputado primer set, las cosas se salieron de control de manera increíble. Novak había desperdiciado varias chances de romper el servicio de Carreño, lo que visiblemente lo frustró bastante, al punto de impactar una pelota que terminaría golpeando a una jueza de línea.

Preocupado, Djokovic se acercó rápidamente a asistir a la mujer y ofrecerle sus disculpas. Sin embargo el daño estaba hecho, y el supervisor del encuentro junto con el juez de silla tomaron la decisión de descalificarlo, tal y como dice el reglamento.

El incidente fué histórico, ya que Djokovic llegaba al torneo como número 1 del mundo, con una impresionante racha de victorias en el tristemente recordado año de la pandemia, y buscando lo que bien podría haber sido su decimooctavo título de Grand Slam. Nada de premios en dinero y nada de puntos para Nole en aquella edición del último major de la temporada.