Un cambio de mentalidad, la clave para que Novak Djokovic pudiese derrotar a Alcaraz y ganar el oro en Paris

ATP
miércoles, 07 agosto 2024 en 10:00
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Novak Djokovic pudo alzarse con la victoria frente a Carlos Alcaraz y así obtuvo el único título que le faltaba en su extenso palmarés: la medalla dorada de los Juegos Olímpicos. Nole venía de perder la final de Wimbledon ante el español en sets corridos, pero en tierra batida, el serbio logró imponerse.
El 24 veces campeón de Grand Slam salía de una operación de menisco sufrida en Roland Garros hace unos meses. A pesar de su dolencia, Djokovic pudo competir a tiempo en el Campeonato de Wimbledon, llegando hasta la final. Sin embargo, Alcaraz le privó de su 25º título de Grand Slam al derrotarlo.

Djokovic emplea cambios tácticos para vengar su derrota en Wimbledon

Al celebrarse la cita olímpica en las pistas de tierra batida de Roland Garros, Djokovic tuvo que cambiar de estrategia si quería tener alguna posibilidad de derrotar a Alcaraz. El español había ganado títulos consecutivos en el Abierto de Francia y en Wimbledon, y era uno de los favoritos para ganar la medalla de oro en su primera participación olímpica.
Por lo tanto, no es de extrañar que Djokovic se viera obligado a intentar algo diferente para evitar una segunda derrota consecutiva en uno de los partidos más importantes de su carrera. El serbio adoptó una mentalidad diferente, sobre todo en la final.
En su partido en Wimbledon, se vio a Djokovic compartir una risita con Alcaraz antes de su paso por el túnel hacia las pistas. Sin embargo, antes de la final olímpica no hizo contacto visual con el español, sino que se centró en su bolsa mientras sus compañeros deseaban suerte a Alcaraz antes de volver a sus asientos.
Otra estrategia utilizada por el serbio fue su enfoque agresivo, ya que pareció precipitado durante la final de SW19, cargando la red en varias ocasiones. La táctica no le dio resultado, ya que su porcentaje de conversión en la red fue del 51%.
Sin embargo, Djokovic parecía tener el control durante su partido en París, acercándose a la red con menos frecuencia y dictando el juego desde la línea de fondo. Esto llevó al serbio a aumentar su porcentaje de puntos ganados en la red (67%).
Por último, Djokovic se mostró más contundente con su derecha, aplicando más velocidad y colocación para frustrar a su oponente español. Le ayudó el hecho de que la pelota no patina sobre la tierra batida, lo que le permitió disponer de más tiempo para alinearse y machacar golpes a placer.