Dominic Thiem admitió recientemente que perdió algo de motivación después de lograr por fin su sueño infantil de convertirse en campeón de un Grand Slam tras ganar el
US Open.
Thiem lo logró hace unos años durante la pandemia al vencer en la final a su buen amigo Alexander Zverev. Fue una victoria enorme, ya que se produjo en una remontada en la que iba perdiendo 0-2 en sets para darle la vuelta y ganar. Ganar fue un sueño hecho realidad para Thiem, pero también algo que afectó a su motivación, ya que perdió parte de ella:
"Nada es fácil, y el éxito requiere trabajo duro, perseverancia y confianza en uno mismo. Después de ganar el US Open, perdí parte de mi impulso interior, después de haber trabajado por ese objetivo durante 17 años. Luego vino la lesión, y de repente ya no estaba entre los tres primeros ni era considerado uno de los mejores jugadores del mundo. Caí en la clasificación. Después de reflexionar mucho, encontré un nuevo objetivo y reavivé mi pasión por el tenis. Me encanta salir a la pista, practicar duro y competir. Me esfuerzo por mejorar cada día, sin rendirme nunca".
Preguntado por cómo se siente en estos momentos, Thiem admitió que se encuentra bien y motivado para alcanzar algunos nuevos objetivos que se ha marcado:
"Me siento bien, mucho mejor que al principio de la temporada. En el último mes, he tenido una gran intensidad en los entrenamientos, pasando cinco horas o más al día en la pista. Los partidos de los últimos torneos también han aumentado mi confianza. Ahora, es importante mantener este nivel de trabajo duro y seguir mejorando cada día. Quiero volver a lo más alto, y aunque no será fácil, lo daré todo".