Roger Federer cuenta el infierno que pasó su mujer antes de retirarse con 24 años: "Estuvo mucho tiempo con muletas"

Miroslava Vavrinec, nacida Vavrincova y más conocida como Mirka, es la mujer de Roger Federer. Pero antes de eso, también fue una jugadora de tenis profesional. No tiene grandes logros en su carrera porque las lesiones lo evitaron. Se vio obligada a colgar la raqueta a los 24 años recién cumplidos.

Mirka empezó a jugar al tenis profesionalmente en 1993, y en septiembre de 2001 alcanzó el número 76 del mundo. Sin embargo, tras sufrir una lesión en el pie, se vio obligada a retirarse un año después.

En una aparición en el podcast What Now de Trevor Noah, Federer habló de varios temas, entre ellos su noviazgo con Mirka y los retos a los que se enfrentó cuando tuvo que lidiar con una lesión en el pie. El 20 veces campeón de Grand Slam destacó un momento en el que Mirka se vio obligada a usar muletas, y recuerda haberle sugerido que se retirara si seguía sintiendo dolor mientras jugaba.

"Tenemos que remontarnos a los primeros días, cuando nos conocimos en los Juegos Olímpicos de 2000", recuerda Federer. "Yo era joven entonces, Mirka estaba en la mitad de su carrera, empezó a tener algunos problemas con el tendón de Aquiles, luchando después de la operación para volver. Recuerdo que estuvo con muletas caminando por todo París.

"Momentos súper duros, estuvo con muletas mucho tiempo. Más de un mes creo... Estuvo haciendo rehabilitación, siempre con dolor y entonces le dije, '¿Por qué no te retiras, quiero decir que esta no es la idea de jugar al tenis con dolor todo el tiempo, y entonces podemos estar de gira juntas?', y yo estaba en la ascensión de... empezando a ganar Wimbledon, top 10, número 1 del mundo. Y ella decía: 'Sí, tienes razón, he terminado, ¡está bien!'".

El maestro suizo bromearía a continuación sobre lo difícil que le resultó aceptar su propia retirada, mientras que Mirka no tuvo muchas reservas a la hora de tomar la misma decisión.

"Entonces aquí estamos, yo... 'Ah, no sé si debería retirarme, tengo 36 años, ya sabes, 37, 38, es tan difícil retirarse'", dijo Federer. "Estoy pensando en ella, ella simplemente dijo: 'Vale, he terminado, no hay problema, ¿cuál es el problema? Y yo dije: 'Retirarme es lo más importante del mundo, es algo muy emotivo, me encanta este deporte'".