Novak Djokovic llega a Roland Garros en una de las peores temporadas de su carrera. Estamos acostumbrados a ver al serbio presentarse en París con varios títulos en sus vitrinas, pero este año ni siquiera ha conseguido alcanzar una final.
Djokovic fue derrotado contundentemente en el set decisivo en semifinales del
Open de Ginebra por Tomas Machac en un partido en el que, a juzgar por su actitud, parecía no querer estar allí. Tras el encuentro, admitió que deseaba olvidarlo.
Sin embargo, está muy preocupado por su estado de forma de cara a Roland Garros. No se considera favorito y atraviesa una crisis. También confesó que se sintió muy mal la noche anterior y durante el primer set, donde parecía físicamente agotado.
En teoría, jugar esta semana parecía la idea perfecta para Djokovic. Pero ha dejado más incógnitas que certezas.
"Por supuesto que estoy preocupado [por mi estado de forma]. No he jugado bien en absoluto este año, salvo algunos partidos aquí y allá. Las cosas son como son. No me veo como favorito en París. Intentaré afrontar los partidos uno tras otro.
No tuve una gran noche, y hoy ha sido difícil. Tuve sensaciones horribles durante el primer set del partido. No quiero restarle mérito a Tomas (Machac), que mereció su victoria, pero no sé qué pensar de este partido. Prefiero olvidarlo".
