Cameron Norrie fue el invitado más reciente del pódcast
Nothing Major, junto a los anfitriones Sam Querrey, John Isner, Jack Sock y Steve Johnson. Habló de la que calificó como su “temporada favorita en el circuito” y detalló cómo derrotar a Carlos Alcaraz, un rival que para muchos parece invencible, pero al que el británico ya ha vencido en tres ocasiones.
Aunque no fue su mejor temporada en cuanto a resultados —sobre todo en la primera mitad del año—, el británico logró recuperarse con actuaciones sólidas. A sus 30 años, alcanzó los cuartos de final en Wimbledon (su segunda presencia en esta ronda de un Grand Slam), llegó a la final del Moselle Open (subcampeón por segundo año consecutivo) y consiguió un par de triunfos ante top-10, incluida su primera victoria sobre un número 1 del mundo en activo, Carlos Alcaraz, en la segunda ronda del Masters de París.
Al británico le preguntaron cuál fue la clave para vencer a Alcaraz, no solo esta vez, sino en tres de sus ocho duelos, un logro del que pocos pueden presumir. “No lo sé, la verdad, simplemente, tienes que jugar bien”, dijo el ex campeón de Indian Wells. “Y me gusta, me gusta bastante, creo que a todos les agrada ser el ‘underdog’ al enfrentarlo. Solo hay que mantenerse disciplinado con él, seguir colgado del partido y ponerlo a prueba al máximo. Pero sí, no estoy muy seguro, para ser honesto.”
Al recordar su victoria concreta sobre Alcaraz cuando el español era número uno del mundo, Norrie evocó la enorme exigencia física y mental del duelo. Señaló que el inicio del partido se jugó a un ritmo vertiginoso que parecía imposible de sostener para cualquiera.
Sin embargo, darse cuenta de que podía igualar esa intensidad le dio confianza para seguir en la pelea, incluso tras ceder el primer set y verse en desventaja ante el mejor del mundo: “Tuve un par de puntos de quiebre. Él aprovechó los suyos. Y pensé: ‘guau, estoy en este partido’. Y la intensidad era de broma, altísima. Fue tan alta en los primeros cinco juegos. Y dije: ‘vale, creo que puedo aguantar todo el partido así’.”
Cuando le pidieron elegir entre Alcaraz y Jannik Sinner, Norrie no dudó en elogiar el espectáculo y la variedad del español, admitiendo que, incluso como rival, sigue siendo fan de verlo jugar: “Siempre voy con Alcaraz, para ser honesto. Siempre pienso que tiene más variedad y me encanta verlo. Es tan bueno de ver, mi favorito para ver. Así que siempre voy con Alcaraz y me quedo con él.”
Entrenando con “perros” bajo el calor argentino
En lugar de seguir la tendencia habitual en el tenis de relajarse en destinos de lujo como Maldivas durante la pretemporada,
Norrie se dirige a Sudamérica para un bloque de entrenamiento exigente. Quiere prepararse para el Abierto de Australia exponiéndose a condiciones extremas en lugar de comodidad.
Su plan pasa por sufrir en las altas temperaturas de Buenos Aires para fortalecer su condición física, y a la vez aprovechar para disfrutar de la cultura y la gastronomía local junto a su equipo técnico: “Sinceramente, estoy emocionado por estar con mi equipo”, añadió el británico. “Todos vamos a Buenos Aires el sábado. Vamos a estar en el calor. Quería meterme dos semanas, lo más caliente que pueda encontrar, y simplemente disfrutarlo. Comer buenos bifes.”
La decisión de entrenar en Argentina también responde a la gran calidad y cantidad de compañeros de práctica disponibles en la región. Norrie describe a los jugadores locales como “perros” por su espíritu combativo y su intensidad en la pista, justo lo que necesita para llegar con ritmo competitivo.
Señala que la densidad de talento de alto nivel en Buenos Aires le permite simular condiciones de partido contra rivales hambrientos cada día de su bloque de pretemporada: “Hay tantos perros en Argentina con ganas de practicar. Hay como 12 tipos dentro del 120, creo. Así que quiero volver y estar en condiciones duras antes de Australia.”