Rafael
Nadal no tendría garantizada una plaza en los Juegos Olímpicos de 2024 debido al descenso en el ranking que experimentará tras su prolongada ausencia del
circuito.
El jugador
anunció recientemente que no participaría en
Roland Garros, un torneo que ha ganado 14 veces y en el que ha competido durante 18 años consecutivos. Nadal declaró que se tomará un descanso indefinido de las pistas y espera jugar su última temporada en 2024, si sus problemas físicos se lo permiten.
Rafael
Nadal caerá en la clasificación tras la conclusión de Roland Garros y estará fuera de los 100 primeros, lo que podría impedirle defender puntos durante el resto del año, agravando aún más su caída en la clasificación. El 22 veces campeón de Grand Slam mencionó que buscará despedirse en sus torneos favoritos y podrá utilizar su ranking protegido para entrar en esos
torneos. De no ser así, la mayoría de los torneos probablemente no dudarían en conceder una Wild Card
a la leyenda del tenis.
Sin embargo, en
París, las reglas son diferentes según lo establecido por la ATP, y para participar, uno debe
estar entre los 56 primeros jugadores del ranking. Además, cada país puede enviar
un máximo de cuatro representantes, por lo que el medallista de oro de Pekín 2008
se enfrentaría a la dura competencia de sus compatriotas que han logrado buenos resultados,
como
Carlos Alcaraz,
Pablo Carreño,
Roberto Bautista Agut, Alejandro Davidovich
Fokina o Bernabé Zapata Miralles, todos ellos clasificados actualmente entre los
entre los 40 primeros.
No obstante,
los organizadores de París podrían concederle una wildcard por sus méritos pasados.
Teniendo en cuenta sus dos medallas de oro (individuales en 2008 y dobles junto a Marc
López en Río 2016) y sus logros en su exitosa carrera, podría
permitir su entrada, aunque necesitaría estar clasificado entre los 300 mejores jugadores.