Jessica Pegula, actual número 3 del ranking WTA, reconoció que aún siente estar un peldaño por debajo de las grandes dominadoras del circuito femenino, Aryna Sabalenka e Iga Swiatek. Aunque la estadounidense se ha consolidado en la élite desde su ingreso al Top 10 en 2022, su palmarés todavía no refleja el mismo nivel de conquistas que el de sus rivales más directas.
Pegula llega al torneo de Stuttgart como reciente campeona del WTA 500 de Charleston y espera rival en su debut entre la polaca Magdalena Frech y la italiana Sara Errani. En la previa, habló con franqueza sobre su lugar en la cima del tenis mundial.
Desde su ingreso al Top 10, Pegula ha sido una presencia constante entre las cinco mejores del mundo. Ganó tres títulos WTA 1000 (además de alcanzar tres finales más), fue finalista del US Open 2024 —donde cayó ante Sabalenka— y de las Finales WTA 2023, donde perdió con Swiatek. Sin embargo, las comparaciones con sus principales rivales la siguen acompañando.
Mientras Swiatek ya suma cinco títulos de Grand Slam y diez coronas WTA 1000, y Sabalenka acumula tres Majors y ocho WTA 1000, Pegula aún no ha logrado levantar un trofeo de Grand Slam. Aun así, destaca el valor de su constancia.
“Estoy muy agradecida de haberme podido mantener como jugadora de élite en los últimos años”, expresó. “Quizá no tengo los grandes títulos todo el tiempo, pero siento que la consistencia es un punto fuerte que tengo. Estoy orgullosa de eso”.
Pegula también confesó que en sus inicios tenía miedo de lograr un buen resultado aislado y no poder sostener ese nivel.
“Recuerdo que la primera vez que llegué a cuartos de final de un Slam, luego fui a Doha y tuve que jugar la fase previa. Me dije: ‘no quiero ser esa jugadora que aparece una vez y luego desaparece’. Quería respaldar los resultados semana tras semana, y eso es muy difícil”.
“Me sorprendió a mí misma lo bien que me adapté. Sinceramente, desde entonces he sido una jugadora de élite. No pensaba que fuera a suceder”, cerró Pegula.