Jannik Sinner comienza a ver la luz al final del túnel mientras se aproxima el fin de su suspensión por dopaje y su regreso en el Abierto de Roma. El número 1 del mundo ya vislumbra su vuelta, ya que a partir de este lunes podrá entrenarse sin restricciones.
El tres veces campeón de Grand Slam llegó a un acuerdo con la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) para cumplir una suspensión de tres meses, evitando así un juicio que podría haber tenido consecuencias más graves. La sanción comenzó el 15 de febrero y concluye el 4 de mayo, por lo que su regreso a la competición está previsto para el 5 de mayo, justo a tiempo para el inicio del Masters 1000 de Roma.
Sinner no ha tenido demasiados motivos de preocupación durante su ausencia, a pesar de perderse tres torneos Masters 1000. Ni Alexander Zverev ni Carlos Alcaraz lograron recortar de forma significativa la distancia con el italiano, incluso habiendo disputado varios torneos adicionales.
Desde este lunes, el tenista de 23 años podrá volver a las instalaciones oficiales de entrenamiento, algo que tenía prohibido durante la suspensión. Sin embargo, se acordó que tras dos meses podría reanudar los entrenamientos en pista, y ya se ha levantado también la prohibición de entrenar con otros jugadores del circuito.
Durante este periodo, el italiano aprovechó para tomarse unas vacaciones, con muy pocas apariciones públicas. Fue visto en un par de ocasiones en una estación de esquí y asistió a algunos compromisos comerciales, como eventos de Gucci en Milán.