El último episodio del podcast
 Nothing Major repasó uno de los momentos más comentados del Masters de París: el intercambio viral entre 
Zizou Bergs y 
Reilly Opelka. Los anfitriones 
John Isner, 
Sam Querrey, Steve Johnson y Jack Sock compartieron sus reacciones al incidente y ofrecieron sus puntos de vista tanto sobre el drama en la pista como sobre la repercusión en las redes sociales.
Durante el episodio, las antiguas estrellas de la ATP también reflexionaron sobre los mejores momentos del Masters de París, que concluyó con la victoria de Jannik Sinner sobre Felix Auger-Aliassime en la final (6-4, 7-6).
Sin embargo, otros momentos acapararon la atención, como la polémica entre Opelka y Bergs. En las redes sociales, el vídeo de Bergs celebrando su victoria en primera ronda contra Alex Michelsen se hizo viral, con Opelka comentando provocativamente: "Prefiero perder 6-2 en el tercero que ganar 6-2 en el tercero y hacer moonwalk".
"Nos gusta un poco de controversia, polémica, como dicen los británicos, en esta vaina", dijo Isner. "Los Reilly Opelka-Zizou Bergs. Así lo comentó Riley en Tennis TV. Todos conocemos Tennis TV en Instagram. Sólo no solicitado, ¿verdad?". Querrey preparó la escena: "Zizou Bergs estaba jugando contra Michelsen. Zizou gana, y mientras Michelsen está destrozando su raqueta, el ángulo de la cámara capta a Zizou haciendo el moonwalk por detrás". Johnson reaccionó inmediatamente: "Es tan bueno", capturando la mezcla perfecta de humor y tensión que hizo que el clip se convirtiera en viral.
El moonwalk viral y el intercambio de Instagram
La discusión giró entonces en torno al comentario de Opelka en Instagram: "Prefiero perder 6-2 en el tercero que ganar 6-2 en el tercero y hacer moonwalk". Bergs respondió con una broma: "Prefiero jugar a no jugar en la clasificación". Querrey explicó el contexto detrás de la interacción, señalando que Opelka había estado en la fase de clasificación de París, jugó un partido y luego se retiró. "Se retiró, pero luego entró como lucky loser. Pero aún así fue un lucky loser", dijo Querrey, refiriéndose al inusual camino de Opelka hacia el cuadro principal.
Los presentadores del podcast coincidieron en que el moonwalk de Bergs y su rápida respuesta ponían de relieve tanto su humor como su espíritu competitivo. Johnson resumió: "Me encanta Riley, pero esta es una victoria de Zizou Bergs". Isner añadió entre risas: "El moonwalk también está muy bien", destacando cómo el movimiento añadió estilo y personalidad a la victoria de Bergs. Sock lo describió como "una combinación de ambos. Es muy bueno", mientras que Johnson alabó el trabajo de cámara, que captó a la perfección el contraste de emociones entre Michelsen y Bergs.
Entrada Lucky Loser de Opelka
El camino de Opelka hacia el cuadro principal añadió capas adicionales a la juguetona indirecta de Bergs. El estadounidense se había retirado originalmente en la segunda ronda de la fase previa de París, dando el pase a Aleksandar Vukic. Sin embargo, debido a las retiradas de Jakub Mensik y Benjamin Bonzi, Opelka volvió a entrar en el cuadro principal como lucky loser. Al ser el jugador mejor clasificado eliminado en la segunda ronda de la fase previa (nº 62), su plaza estaba garantizada a pesar de la retirada anterior.
Esta situación inusual dio a los aficionados y a los jugadores más motivos para fijarse en el moonwalk de Bergs y en su respuesta en Instagram. Como Querrey señaló en el podcast, la combinación de la extraña situación clasificatoria de Opelka y la divertida celebración de Bergs creó una historia perfecta, mezclando el tenis de competición con la personalidad fuera de la pista y el estilo de las redes sociales. Es un ejemplo de cómo los momentos del tenis profesional pueden captar la atención más allá del marcador.
El lugar, el público y el ambiente
Más allá del momento viral, los anfitriones hablaron de la propia sede del Masters de París. Isner comentó la energía del público: "Fue justo en el momento justo, ¿verdad? Justo cuando estaba golpeando la raqueta. Y el público se volvió loco. Tenía un buen contingente belga detrás de él". El estadio estaba abarrotado, con unos 50.000 espectadores más que en años anteriores.
Querrey añadió que la sede parecía perfecta, a pesar de los cambios: "No te habrías enterado de que han cambiado de sede". Isner coincidió, elogiando la pista central y el ambiente en general.