Sólo quedan dos semanas de competición antes del final de la temporada 2025 del WTA Tour, y la WTA Race to Riad se ha actualizado. El Asian Swing entra en su fase final tras el WTA 500 Ningbo Open y el WTA 250 Osaka Open, que concluyeron con Elena Rybakina y Leylah Fernandez como campeonas de la semana.

La italiana Jasmine Paolini ha sido la última jugadora en incorporarse a la lista de clasificación de las Finales WTA, confirmada como 7ª jugadora en entrar en el cuadro tras alcanzar las semifinales en Ningbo. Aunque fue derrotada por su principal perseguidora -Elena Rybakina-, a la jugadora de 29 años le bastó para distanciarse de Mirra Andreeva y dejar la discusión por la 8ª plaza como un debate entre sólo dos partes: la kazaja contra la adolescente rusa.

Andreeva optó por no jugar torneos esta semana, pero quizá no esperaba que Paolini y Rybakina fueran tan regulares en las últimas semanas. La adolescente sólo alcanzó la tercera ronda en el US Open, los octavos de final en Pekín, y luego cayó en sus debuts en Wuhan y Ningbo. Andreeva apenas sumó puntos en la última parte del año, a pesar de haberse mantenido dentro del Top-5 durante los ocho meses anteriores.

Así, entre las jugadoras aseguradas entre las aspirantes al título en las Finales de la WTA figuran las cuatro campeonas de Grand Slam del año: Madison Keys (Abierto de Australia), Coco Gauff (Abierto de Francia), Iga Swiatek (Wimbledon) y Aryna Sabalenka (Abierto de Estados Unidos). A ellas se unen Amanda Anisimova, dos veces finalista de un major, y Jessica Pegula, dos veces finalista de la WTA 1000 y ganadora de tres títulos esta temporada (WTA 500 Charleston y Bad Homburg, WTA 250 Austin). Cuatro estadounidenses están aseguradas en la competición, algo que no ocurría desde hace dos décadas.

La disputa queda ahora cerrada entre Mirra Andreeva (8ª, 4.319 puntos) y Elena Rybakina (9ª, 4.305 puntos). La rusa pasó por momentos difíciles en las últimas semanas, sufriendo derrotas consecutivas ante Laura Siegemund en Wuhan y Zhu Lin en Ningbo, ambas tras dilapidar una ventaja de un set. Al no sumar puntos, dejó la posibilidad de ser alcanzada por sus perseguidoras, sobre las que tenía una amplia ventaja hace sólo unas semanas.

Paolini ha tenido una fuerte presencia en la última parte del año, alcanzando los cuartos de final en el Abierto de China, y las semifinales en los Abiertos de Wuhan y Ningbo, con un balance de 8-3 en el Asian Swing, que le bastó para superar a Andreeva y hacerse con el 7º puesto de la Carrera. Mientras Andreeva descansa en el 8º puesto, Rybakina aterriza en el 9º tras alcanzar los cuartos de final en Wuhan y ganar el título en Ningbo. Sólo necesita acumular 15 puntos para superar a Andreeva y tiene un último torneo esta semana en el Abierto de Tokio.

Sin embargo, no será fácil para la campeona de Wimbledon 2022 asegurarse la última plaza. La regla del torneo obligatorio sólo tiene en cuenta los 18 mejores torneos, siete de los cuales son exclusivamente pruebas WTA 500 y WTA 250. En vista de ello, Rybakina no sumará puntos a menos que alcance al menos las semifinales en Tokio. La kazaja recibió un bye en primera ronda, por lo que comienza el torneo en octavos de final, donde deberá enfrentarse a Leylah Fernández, que viene de vencer a la clasificadora Maria Sakkari en sets corridos. Si avanza, se enfrentará a la ganadora entre Victoria Mboko (9ª) y Eva Lys (clasificada); ambos partidos se decidirán este jueves.

Mientras tanto, el 10º puesto lo ocupa cómodamente Ekaterina Alexandrova (10ª), que tiene garantizado terminar el año en el Top-10, con una amplia ventaja sobre Clara Tauson (2.770). La rusa alcanzó la final en Ningbo y, pese a la derrota ante Rybakina, sumó 300 puntos para ampliar su distancia con la danesa y asegurarse este hito en su carrera a los 30 años.

Otras que sumaron puntos en la Carrera fueron la rusa Diana Shnaider -semifinalista en Ningbo que alcanzó el 18º puesto- y Tereza Valentova, que, tras alcanzar la final de Osaka, entró en el Top-100 por primera vez en su carrera.