El hecho de que
Caroline Wozniacki no vuelva a jugar este año parece que dará un quebradero de cabeza al tenis australiano de cara al nuevo año del
Open de Australia, ya que muchas jugadoras aspiran a reiniciar sus carreras allí en la temporada 2024.
Wozniacki, a pesar de haber jugado magníficamente en las últimas semanas y de haber caído anoche ante Coco Gauff en los octavos de final del US Open, no jugará Guadalajara ni ninguna de las próximas pruebas del circuito. En su rueda de prensa en Dinamarca, la jugadora ha declarado que el Open de Australia es ahora su gran objetivo.
Pero lo mismo puede decirse de dos jugadoras en particular que también aspiran a hacer lo mismo que ella. Se trata de la ex bicampeona
Naomi Osaka, que declaró incluso antes que Wozniacki su intención de volver poco después de ser madre.
La ex campeona
Angelique Kerber también manifestó a principios de año su intención de volver al circuito tras haber sido madre. Otras en la lista serían
Emma Raducanu, que a pesar de las protestas de algunos estaría en la lista. También
Venus Williams, si decide jugar cuando se acerque su 44 cumpleaños.
Es interesante el regreso de
Garbiñe Muguruza, que se tomó un descanso de la gira a principios de temporada. También quiere volver en 2024. Así como el dilema en torno a
Simona Halep, que en teoría podría haber cumplido cualquier sanción que se le impusiera en ese momento, dado que ha estado fuera un año y aún podría ser declarada inocente.
En teoría, Kerber y Raducanu podrían utilizar las clasificaciones protegidas. Pero con jugadoras locales como Ajla Tomljanovic probablemente también compitiendo por una, uno o dos grandes nombres podrían quedarse fuera.