Iga Swiatek, tras su derrota en el US Open, no quiere seguir priorizando recuperar el número 1 del mundo y quiere tomarse con más relajación el final de temporada.
"Antes del US Open estaba indecisa sobre si quería seguir intentándolo, jugar todos los torneos para luchar por terminar el año en el número 1 del mundo", admitió Swiatek. "Después del US Open me di cuenta de que había cosas más importantes de las que ocuparme. A veces es mejor tomárselo con calma."
"También he cambiado un poco mi actitud, sólo quiero ser mejor jugadora", dijo Swiatek. "Sinceramente, por un lado, tuve que obligarme a parar. Por otro, sentía que no era el camino correcto. He tenido el número 1 durante mucho tiempo. Creo que merezco un poco de tiempo para reagruparme y ser mejor."
Esta declaración de Swiatek resalta su deseo de enfocarse en la calidad sobre la cantidad de torneos que juega. Su determinación por perfeccionar su juego y mantener su posición en la élite del tenis es evidente.
"Renunciar a los objetivos a veces no es el camino correcto", enfatizó Swiatek. "Me alegro de que hayamos decidido jugar sólo en Tokio, Pekín y las Finales de la WTA. Creo que sería más fácil si las Finales de la WTA se celebraran antes, porque entonces podría tener una pretemporada más larga para progresar, pero hay que adaptarse".
La polaca, que ha sido una de las figuras más notables en el tenis femenino en los últimos años, ahora se enfrenta a un desafío diferente al priorizar su desarrollo sobre la búsqueda constante del número 1 del mundo. Su enfoque más selectivo en los torneos seguramente será observado de cerca por sus seguidores y competidores por igual.