Simona Halep ha admitido que jugar el
Miami Open fue un error. La tenista de 32 años ha pasado por momentos difíciles en los últimos años, especialmente cuando dio positivo por consumo de una sustancia prohibida durante un control antidopaje en septiembre de 2022.
La sanción impuesta a Halep fue de cuatro años, pero fue anulada en su última apelación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), ya que el veredicto final redujo su suspensión de cuatro años a sólo nueve meses. Sin embargo, desde entonces, el camino no ha sido fácil para la ex número uno del mundo, que ha luchado por mantener su forma física. Por este motivo, sólo ha podido disputar dos partidos este año y está de baja desde mayo.
Halep fue citada recientemente en un reportaje en el que admitía que jugar en el Abierto de Miami en marzo, poco menos de un mes después de que se anulara su suspensión, fue un error. Afirmó que jugar sin ninguna preparación no fue una "gran" decisión, algo de lo que ahora se da cuenta.
"Sinceramente, fue un error jugar en Miami por mi cuerpo, porque en febrero, cuando tuve la vista, no entrené porque estaba agotada, y estaba en tensión todo el tiempo", dijo. "Me dije: voy a recuperarme y voy a mantener la calma. Y no hice ni una hora de deporte en febrero. Luego, al ir directamente al partido, físicamente no estaba muy bien".
En el Abierto de Miami, Halep, que ha ganado dos títulos de Grand Slam en su ilustre carrera, perdió ante la española Paula Badosa en la ronda de 128 con un marcador de 6-1, 4-6, 3-6. En su otra única aparición este año, durante el Trophée Clarins de París (Francia), se vio obligada a retirarse en la ronda de 32 contra la estadounidense Mccartney Kessler.