"¿Quién va a creer a la bielorrusa?": Sabalenka afirma que ha sufrido abusos en la guerra y responde a los comentarios de Tsurenko

WTA
sábado, 18 marzo 2023 en 11:39
Copyright ProShots 19151789
Aryna Sabalenka se ha distanciado de las acusaciones vertidas por el entrenador de Lesia Tsurenko, quien alegó que Sabalenka apoyaba teóricamente la guerra.
La bielorrusa respondió a esas acusaciones tras su victoria sobre Sakkari en Indian Wells. Su respuesta se centró en el simple hecho de que las jugadoras no son realmente responsables de las acciones de su gobierno ni pueden influir en él:
"Nadie puede controlar las emociones de los demás. Y creo que la WTA está haciendo todo lo posible por controlarlo. Sí, por supuesto que hay mucha tensión entre nosotros. Todavía creo que no he hecho nada malo a los ucranianos; ni yo, ni los atletas rusos, ni los bielorrusos, ninguno de nosotros ha hecho nada malo. Incluso algunos de nosotros estamos como ayudando. Como no, cómo decirlo, públicamente, sí".
Dijo además: "¿Qué más puedo decir? Creo que la WTA está haciendo un gran trabajo para apoyar a ambas partes, y lo que sea... Quiero decir, no puedo controlar sus emociones. He pasado por muchas cosas malas y, por desgracia, no puedo decir eso porque quién va a creer a la chica bielorrusa. Quiero decir, hablando de su entrenador. Yo también he pasado por un infierno, y entiendo que... No lo sé".
Sobre la retirada de Tsurenko en concreto, Sabalenka añadió: "Sí, quiero decir, creo que la retirada de Tsurenko fue algo más que un ataque de pánico o algo más que una situación política. Creo que hay algo más. El año pasado tuve una situación muy dura con su entrenador por la forma en que se comportó conmigo. Creo que ese tipo la presionó mucho, y por eso ocurrió", dijo Aryna Sabalenka.
Y concluyó con: "No tiene nada que ver con la WTA. Están haciendo su mejor trabajo. ¿Qué pueden hacer? Nadie de nosotros tiene el control en esta situación. Todos intentamos mantener la calma en el vestuario y comprender que no es culpa nuestra y que todos comprendemos a los ucranianos y nos sentimos mal por ellos.