Coco Gauff puso el broche de oro a su estelar gira asiática con otra deslumbrante exhibición, derrotando a Jessica Pegula en sets corridos para alzarse con el trofeo del Abierto de Wuhan (6-4, 7-5). La estadounidense de 21 años hizo gala no sólo de su regularidad, sino también de su fortaleza mental, negándose a dejar que Pegula se impusiera en tres sets (la estrella de 31 años había llegado a la final en ocho de sus nueve partidos anteriores, ganando siete de ellos).
La número 3 del mundo tuvo que superar una vez más sus problemas de saque, con ocho dobles faltas y sólo cuatro aces. Aun así, su juego agresivo desde la línea de fondo y su compostura en los momentos clave fueron suficientes para sellar el undécimo título de su carrera y el segundo de la temporada, con lo que suma tres trofeos WTA 1000, el mismo número que su rival Pegula.
Gauff comenzó su discurso con calidez y humildad, elogiando a su rival por su resistencia a lo largo del torneo. Calificó a la número 6 del mundo de "reina de los tres sets", admitiendo que estaba decidida a evitar un partido decisivo porque "las probabilidades estarían a su favor". Gauff se aseguró de destacar cómo Pegula la recibió "con los brazos abiertos" cuando se incorporó por primera vez al circuito de la WTA, un momento que, según dijo, sigue significando mucho para ella hoy en día.
Gauff comenzó su discurso elogiando a Pegula con la calidez y el humor que la caracterizan. "Me gustaría felicitar a Jess por un torneo increíble", empezó. "Estabas jugando muchos partidos a tres sets -eras la reina de los tres sets-, así que estaba decidida a no dejarte llegar hoy porque sentía que las probabilidades estarían a tu favor".
Sonrió mientras el público se reía, antes de volverse sincera. "Cuando vine de gira, fuisteis de los primeros en ser amables conmigo y recibirme con los brazos abiertos. Eso es muy importante, y lo sigue siendo. Es genial jugar por fin una final contra ti, y espero que sean muchas más".
La joven estadounidense también mostró su respeto al equipo de Pegula, al que calificó de "actos de clase" y añadió: "Es un honor compartir la pista con todos vosotros", mientras describía la final como "competida, emotiva y exactamente el tipo de partido que quieres jugar en un gran acontecimiento como éste".
"Habéis superado mis expectativas": Gauff, abrumado por la afición de Wuhan
Cambiando de tono, Gauff expresó su sincero agradecimiento a los organizadores del torneo, a los patrocinadores y a los aficionados. "Ha sido un torneo increíble", declaró. "Como mencionó Jess, las mejoras desde el año pasado han sido asombrosas y nos han facilitado mucho esta semana a los jugadores. Quiero dar las gracias a todos los que lo han hecho posible: al personal, a los voluntarios y a los recogepelotas: sois increíbles."
La número 3 del mundo también habló de lo mucho que ha disfrutado compitiendo en China. "Los aficionados de aquí han superado mis expectativas", declaró. "He tenido que traerme una maleta de más a casa por todos los regalos que he recibido. Me han hecho sentir muy bienvenida y querida, y creo que ésa es una de las razones por las que siempre juego bien aquí: por toda la buena energía."
Su afecto por la afición local se extendió más allá de Wuhan. "Desde Pekín hasta aquí, he sentido tanta pasión", continuó. "Me habéis hecho sentir como en casa, aunque esté a miles de kilómetros. Nunca lo olvidaré".
Terminó su discurso con la misma serenidad que muestra en la pista. "Mi fe es una parte muy fuerte de lo que soy", dijo. "Quiero dar gracias a Dios por otra oportunidad de estar en una final y por mantenerme a salvo. Es algo a lo que siempre me aferro. Muchas gracias a todos, os aprecio de verdad, y nos vemos el año que viene. Xie Xie".