Le costó cerrar el partido pero tenía mucha ventaja.
Emma Raducanu ha confirmado su papel de favorita en el primer encuentro de los octavos de final de la
Billie Jean King Cup contra
Jule Niemeier. Gracias a esta victoria, todo queda en manos de Katie Boulter para darle el pase a cuartos a Gran Bretaña frente a Alemania.
Raducanu se impuso por 6-4 y 6-4 a la alemana, y Katie Boulter intentará ahora aportar su granito de arena para que Gran Bretaña supere la línea sin tener que recurrir al dobles. No es la primera vez que la ex campeona del Abierto de Estados Unidos se luce en este formato este año.
Fue la principal protagonista de su victoria sobre Francia, lo que hace aún más extraño que decidiera saltarse la temporada de tierra batida, sobre todo cuando estaba ganando tanto fuelle.
También estuvo a punto de no jugar, ya que sus recientes retiradas la encaminaban quizás a poner fin a su temporada, pero respondió a la llamada y en este caso fue una decisión inteligente.
Sobre todo en el primer set, su saque fue fantástico. Manejó la presión y la situación mejor que Niemeier para llevarse el set por 6-4. Logró siete aces, cuatro de ellos en el 5-3, y ganó el 80% de sus puntos con el primer saque. Ya había dicho antes que no se sentía demasiado atrasada a pesar de no haber jugado en más de dos meses, pero aún así mostró poco óxido. También logró una rotura al comienzo del segundo set y parecía encaminarse hacia el final.
Pero Niemeier tuvo algo de esperanza. Raducanu rompió dos veces seguidas para ponerse 5-2, pero empezó a flaquear cuando estaba al servicio. Desperdició un punto de partido y se lo cedió a la alemana, que logró el 5-3 y luego el 5-4, salvando otros tres puntos de partido en el proceso.
Pero finalmente, en el sexto intento, esa esperanza se esfumó cuando Raducanu se hizo con la victoria y ahora le toca a la jugadora más destacada del equipo, Katie Boulter, sellar el triunfo contra Laura Siegemund.