La australiana
Daria Kasatkina ha sufrido un duro golpe, apenas unas semanas después de anunciar sus dificultades mentales. La jugadora de 28 años ha pasado por una montaña rusa esta temporada.
Fuera de la pista, a principios de año se anunció que Kasatkina había conseguido cambiar su nacionalidad de Rusia a Australia. En el momento del anuncio, Kasatkina estaba eufórica. En una entrevista con The Guardian, Kasatkina declaró que no se lo había comunicado a nadie porque estaba esperando a que se hiciera oficial.
"No se lo dije a nadie antes de que saliera",
dijo entonces Kasatkina. "Dasha me llamó enseguida y estaba muy emocionada. Se alegró mucho por mí y yo me alegré mucho porque ella se alegró mucho por mí. Fue sonatural y ahora somos vecinos de verdad. No podría tener una vecina mejor. Siempre está contenta, es una de las personas más felices, la conozco desde hace mucho tiempo, pero es especial que se sienta tan feliz por mí".
Continuó diciendo: "Y ahora formamos parte de un equipo. Por supuesto, es una gran decisión. Nunca es fácil hacer algo así. Pero cuando doy este paso soy muy consciente de que es lo mejor para mi futuro. Me he visto en la situación de tener que tomar esta decisión. Sinceramente, en los dos últimos meses me he convertido en una persona mucho más feliz. Siento que me he quitado un gran peso de encima. Soy libre y feliz. Para mí esto es lo más importante y... siento que esta decisión es la correcta".
En 2025, Kasatkina disputó 41 partidos en diferentes competiciones y solo consiguió ganar 19 de ellos. Era la primera vez desde 2019 que Kasatkina terminaba el año con un porcentaje de victorias inferior al 50%.
Las cosas van de mal en peor para Kasatkina
Tras estos malos resultados, Kasatkina decidió retirarse del Abierto de Ningbo y poner fin a su temporada antes de tiempo. Kasatkina, en un emotivo post de Instagram, afirmó que se encontraba en un "punto de ruptura", y que no estaba sola después de pasar por desafíos mentales y emocionales a lo largo de esta temporada.
"He estado lejos de estar bien durante mucho tiempo y la verdad es que mis resultados y actuaciones lo demuestran, los aficionados no son estúpidos, también pueden verlo", escribió. "He ocultado mis sentimientos porque no quiero que parezca que me quejo, que soy débil o, Dios no lo quiera, que soy desagradecida o que no aprecio esta increíble vida que vivimos como tenistas profesionales. El calendario es demasiado, mental y emocionalmente estoy al límite y, por desgracia, no estoy sola".
Continúa escribiendo: "Añádase a la mezcla el estrés emocional y mental relacionado con mi cambio de nacionalidad, el no poder ver a mis padres (4 años ya para mi padre y para mí), más las continuas batallas para conseguir la plena elegibilidad para competir en Australia, es mucho y no hay mucho que pueda soportar como mujer individual, todo ello mientras compito con las mejores atletas del mundo. Si esto me hace débil, que así sea, soy débil. Sin embargo, sé que soy fuerte y que me haré más fuerte estando lejos, recargándome, reagrupándome y revitalizándome. Es hora de que me escuche a mí misma para cambiar, mi mente, mi corazón y mi cuerpo".
Según un informe publicado en el medio inglés Daily Express, la decisión de retirarse del Abierto de Ningbo le ha costado a Kasatkina 500 puntos de rating, ya que se suponía que era la defensora del título. El resultado es que Kasatkina ha perdido 13 puestos en la clasificación actualizada de la WTA y ahora ocupa la 35ª posición. Esto significa que Kasatkina comenzará el Abierto de Australia de 2026 como jugadora no cabeza de serie, lo que podría suponer que se enfrente a una rival más dura.