Coco Gauff es conocida por decir lo que piensa y usar su voz para luchas sociales. Arabia Saudí no es un país reputado por llevar a rajatabla los derechos humanos y ha creado polémica desde que decidió apostar por el deporte. Lo ha hecho a base de talonario, con millones de dólares encima de la mesa. Este año, por ejemplo, en tenis, celebrarán las WTA Finals y las ATP Next Gen Finals. La estadounidense ha hablado sobre las dudas que tuvo sobre viajar o no para disputar el último torneo del año.
El país árabe ha ofrecido recientemente el mayor premio en metálico de la historia del tenis, al conceder 6 millones de dólares al campeón del Six Kings Slam, Jannik Sinner, una cantidad significativamente superior a los 3,6 millones que ganó en el US Open o los 3,1 millones del Open de Australia. Además, esta vez sólo necesitó tres partidos al mejor de tres para ganar.
Arabia Saudí también ha ampliado su influencia en otros deportes, como el boxeo, el golf y el fútbol, en lo que muchos consideran un intento del país de "lavar la cara al deporte" en medio de las críticas internacionales sobre cuestiones como los derechos humanos, los derechos de la mujer y los derechos de la comunidad LGBTQ+.
El debate sobre los derechos humanos en Arabia Saudí resurge justo antes del torneo más importante de la temporada de la WTA. La número 3 del mundo, Coco Gauff, reconoció recientemente que tenía reservas sobre su participación en Riad: "Te mentiría si te dijera que no tengo reservas. Obviamente, ya saben quién soy y las cosas de las que hablo".
"Estuve en todas las convocatorias de jugadoras que pude hacer con la WTA. Una de las cosas que dije fue que si veníamos aquí, no podíamos venir, jugar nuestro torneo e irnos. Tenemos que tener un programa o un plan real", añadió la campeona del US Open 2023.
"Hablamos con muchas mujeres aquí en Arabia Saudí. Una de ellas fue la princesa Reema. Tuvimos múltiples llamadas con ella sobre el mejor enfoque para entrar en este lugar diferente en el que las mujeres, sobre todo de Estados Unidos, nunca han entrado realmente."
"Creo que para mí era importante, y fue una de las cuestiones que planteé, en relación con las cuestiones LGBTQ, los derechos de las mujeres y cómo podemos ayudar con eso", añadió Gauff. "También soy muy consciente de que no vamos a llegar aquí y cambiarlo todo... Pero es un tipo de conversación con matices".
"Creo que conociendo el pasado -de mi abuela, integrando su escuela- a la gente no le va a gustar, pero obviamente, a la larga, creo que podría ser mejor para todos", concluyó.
Gauff debutará el domingo contra la número 2 del mundo, Iga Swiatek, un partido complicado para la estadounidense, que ha tenido problemas contra la polaca, perdiendo 11 de sus 12 enfrentamientos hasta la fecha. También compartirá grupo con la campeona de Wimbledon Barbora Krejcikova y la subcampeona del US Open Jessica Pegula.