Se viene hablando mucho en los últimos años de la desigualdad en los salarios entre hombres y mujeres. En el tenis, no es diferente. A pesar de que algunos torneos como los Grand Slams han conseguido poner unos premios económicos equitativos, no es el caso de todos los eventos. En el pasado
Cincinnati Open se vio que la brecha sigue siendo muy grande.
Ganado por
Jannik Sinner y
Aryna Sabalenka, ambos jugando al mejor de tres formato no fue un campo de juego igualado. A pesar de lo que parecía sobre el papel, ambos se impusieron a Frances Tiafoe y Jessica Pegula en sus finales.
Es bastante fácil, sobre todo esta semana, verse envuelto en el escándalo de dopaje de Sinner, pero el lunes ganó un título al deshacerse del estadounidense. Su estado de forma era magnífico a pesar de todo. Además de sus recientes problemas de cadera y su enfermedad.
Pero recibió un sueldo asombroso en comparación con Sabalenka. Por supuesto, la bielorrusa, número 2 del mundo, no se va de Mason, Ohio, sin dinero y, desde luego, no es una miseria, pero en términos de ambos, sí lo es.
Sinner reclama 1.049.460 dólares por hacerse con el título, mientras que Sabalenka reclama 523.485 dólares. Como referencia, el subcampeón masculino, Frances Tiafoe, recibió mucho más, 573.090 dólares. Compitieron en la misma sede toda la semana y jugaron al mejor de tres sets también toda la semana.
Pero no cobrarán lo mismo. Se han hecho promesas para igualar los premios económicos, sobre todo teniendo en cuenta que juegan la misma cantidad de tenis. Pero, a pesar de ello, la disparidad sigue existiendo en los premios económicos del tenis.
Trabajar para conseguir un premio que no es el mismo a pesar de jugar el mismo tenis plantea muchas preguntas. Rafael Nadal planteó la cuestión a principios de año y el 22 veces campeón de Grand Slam apoyó firmemente cualquier iniciativa para igualar los premios.
"No quiero ser hipócrita y decir cosas que son fáciles de decir y que no siento. ¿Qué quieres que diga? Para mí, la inversión para las mujeres debería ser la misma que para los hombres", dijo Nadal.
"Las oportunidades, las mismas. Los salarios, ¿los mismos? No, ¿para qué? No es injusto, lo que es injusto es que no haya igualdad de oportunidades.
"Tengo una madre y una hermana. Si me dicen que los hombres y las mujeres merecen las mismas oportunidades, soy feminista. Este término se lleva al extremo. Si hablamos de cosas lógicas y normales en esta conversación, claro que quiero igualdad.
"Para mí, la igualdad no consiste en hacer regalos, pero si Serena Williams gana más que yo, quiero que gane más que yo. Quiero igualdad, quiero que las mujeres ganen más que los hombres si generan más que ellos.
"Lo que me molesta es cuando la gente me dice que los ingresos y las ganancias deberían ser iguales. En el tenis, por alguna razón, los pagos son casi iguales en la mayoría de los eventos porque en su momento hubo una oportunidad para que se viera el tenis femenino.
"El tenis femenino es muy popular en todo el mundo. No quiero entrar en una pelea sobre esto, el problema para mí es la discusión."