Novak Djokiovic está dispuesto a ir un paso más allá mientras busca conquistar un inédito 25º título de Grand Slam. Está haciendo todo lo posible en su preparación para el próximo Australian Open, incorporando al Dr. Mark Kovacs a su equipo.
Con 38 años, sigue resultando increíble creer que Djokovic compite con los mejores del mundo, gana títulos y llega lejos en los eventos más grandes que ofrece el deporte. Aunque es una gesta impresionante, ya no es el jugador de hace unos años, ganando majors con regularidad y entrando a los torneos como el rival a batir. Ese estatus ha pasado a Carlos Alcaraz y Jannik Sinner. Se han repartido los últimos ocho Grand Slams entre ambos, con Djokovic alcanzando solo una final y cuatro semifinales consecutivas en 2025.
A medida que el tiempo se agota, está desesperado por seguir inscribiendo su nombre en el palmarés, consolidando aún más su legado en los archivos del tenis. Una gran parte de su éxito radica en cómo ha mantenido su cuerpo en condiciones impecables. Su enfoque y atención a la preparación física y la recuperación están a años luz del resto del circuito, algo que se refleja en la pista junto con su longevidad.
Con esto en mente, el serbio ha incorporado a
Kovacs para supervisar su progreso. El australiano es un experto en rendimiento humano, con excelencia en este ámbito del tenis. Es una de las figuras más respetadas en este campo. El tenis ha estado en la vida de Kovacs desde hace tiempo. Cuando se mudó a Estados Unidos, se proclamó campeón de la NCAA. Pasó a un rol más centrado en la preparación física y científica, estudiando el deporte meticulosamente y trasladando sus hallazgos. Kovacs es CEO y cofundador de la International Tennis Performance Association (ITPA) y cuenta con más de 50 estudios revisados por pares dedicados a la biomecánica específica del tenis. Ha influido en jugadoras y jugadores como Sloane Stephens, John Isner y Coco Gauff, entre otros.
Todo esto ha llamado la atención de Djokovic, que busca capitalizar el conocimiento y la experiencia de Kovacs. Mantendrá el foco plenamente en Djokovic, observando todo lo que hace sin la raqueta en la mano, desde la preparación física, la prevención de lesiones, la biomecánica, la recuperación y la optimización del rendimiento en pista.
Djokovic apunta a la historia en Melbourne
Djokovic ha tenido más tiempo de preparación para el Australian Open que cualquiera de sus compañeros. Tras tomar la decisión ejecutiva de saltarse las ATP Finals, centró rápidamente su atención en el primer Grand Slam del año. Es un lugar que conoce y ama, habiendo levantado el título en 10 ocasiones, la última en 2023 tras derrotar a Stefanos Tsitsipas en la final. Después de dos presencias en semifinales, Djokovic espera dar el siguiente paso y recuperar su toque ganador en el gran escenario. Si lo consigue, superará a la icónica Margaret Court en títulos de Grand Slam. Ambos están actualmente con 24 cada uno, pero Djokovic quiere el récord en solitario.
Al igual que muchos jugadores, el número cuatro del mundo ha iniciado su pretemporada, optando por prepararse en Catar. Una amplia gama de torneos y exhibiciones estará disponible para que los jugadores compitan y los aficionados disfruten, pero esto no atrae a Djokovic. Su intención es que el major sea su primero en 2026. Esto podría conducir a un patrón similar al de 2025, cuando se saltó eventos importantes para priorizar la recuperación y la preparación física de cara a los Grand Slams.
No tendrá que esperar mucho para comprobar si el trabajo realizado con Kovacs y el resto de su equipo da resultado. El
Australian Open se disputará del 18 de enero al 1 de febrero.