El tenis estadounidense sigue en auge y, con el repunte este año de Madison Keys, de nuevo campeona del Abierto de Australia, así como la increíble Amanda Aniismova, alcanza un nuevo techo para el deporte en el país por primera vez desde 2004.
Cuatro jugadoras terminaron en el top 10 de la WTA a final de temporada, con
Coco Gauff liderando como No.3 del ranking anual. Le sigue
Amanda Anisimova, actual No.4 del mundo, quien quizá ha firmado el verdadero año de irrupción en clave estadounidense.
El ascenso de Anisimova y el triunfo parisino de Gauff
Pese a que Gauff ganó Roland Garros y Wunan, también ha sido un año marcado de nuevo por problemas con el servicio y por la irregularidad, así que, como de costumbre, cuando le funciona, le funciona. Cuando no, no.
Jessica Pegula ha sido durante mucho tiempo el modelo de consistencia, aunque incluso ella ha tenido altibajos. De ser candidata al No.1 del mundo en primavera a perder partidos ante jugadoras como Moyuka Uchijima y Lois Boisson durante la gira de tierra batida y no imponer siempre su ley, fue un año de aprendizaje, si bien se clasificó para las Finales de fin de año con bastante holgura, lo que siempre es un termómetro de la temporada.
Mirra Andreeva, por ejemplo, no lo logró pese a ganar Indian Wells y varios otros torneos, porque su nivel cayó en el momento equivocado del curso; así que hay mucho método en la locura cuando se habla de regularidad.
No sorprende que las estadounidenses estén rindiendo tan bien y es la primera vez desde 2002 que hubo presencia de jugadoras de Estados Unidos en las cuatro finales de Grand Slam este año. Anisimova en dos, Gauff en una y Keys en una.
El mejor resultado de Pegula en Grand Slam este año fue alcanzar las semifinales del US Open, pero ganó más títulos que sus compatriotas, con tres en total y en tres superficies distintas, en Austin, Charleston y Bad Homburg, pasando de pista dura a tierra y a hierba.
Pero no son solo las mujeres, los hombres también brillan. Es la primera vez que dos estadounidenses acaban en el top 10 desde 2008, cuando lo hicieron Roddick y Blake, cerrando la temporada en la élite. Fritz y Shelton terminaron sexto y noveno, respectivamente.
Fritz y Shelton alcanzaron semifinales de Grand Slam en el US Open y Wimbledon, y ambos levantaron títulos. Fritz ganó dos sobre hierba, en Stuttgart y Eastbourne, mientras que Shelton irrumpió triunfando en Toronto.
Es el primer año en que un total de seis estadounidenses terminan todos dentro del top 10 desde 2004, cuando lo lograron Davenport, Serena, Venus y Capriati, además de Roddick y Agassi.
El continuo ascenso de las principales estrellas estadounidenses en ambos circuitos es digno de admiración.