Alexander Zverev cerró el sábado por la mañana el camino hacia la tercera ronda del
Madrid Open tras imponerse por 6-7(6), 7-5 y 6-0 a
Roberto Carballés Baena.
Zverev, que acaba de recuperarse de una lesión, aguantó las más de tres horas que duró el encuentro. Carballés Baena desplegó un tenis soberbio, pero sufrió un calambre en el set decisivo y cedió al alemán el impulso hacia la victoria. Señales preocupantes para Zverev que se encamina a encontrar su nivel a pesar de ir un set abajo. El siguiente será Hugo Grenier en octavos de final. El francés se ha clasificado tras derrotar hoy a Sebastian Korda. Carlos Alcaraz podría esperar en cuartos de final.
El primer set estuvo a punto de decantarse del lado de Zverev, que aguantó un 40-0 en contra para ponerse 3-3 antes de pedir tiempo muerto por motivos médicos y salvar una bola de break. Zverev salvó siete puntos de ruptura y dos de set. Se fijó un tiebreak y el árbitro se equivocó en una decisión importante. En el tiebreak, Zverev logró una gran devolución en un punto de set (6-5), que el juez de línea anuló y Baena sentenció con un 8-6 en una hora y 33 minutos de set.
En el segundo set, Carballés Baena se puso inicialmente 4-3 arriba aunque perdió el break enseguida. Carballés Baena sobrevivió a puntos de set para hacer el 5-5 e incluso tuvo un punto de quiebre para ponerse a uno de distancia, pero Zverev finalmente hizo el 6-5 antes de romper el servicio en el 7-5 para llevárselo hasta el final.
Zverev selló un break para comenzar el set decisivo con 2-0 arriba, con el español empezando a parecer fatigado y el primero servía para ir medio camino hacia la victoria con 3-0. El cansancio se hizo notar cuando recibió un masaje entre juegos y Zverev selló un soberbio dropshot cruzado para volver a tener punto de break y después de que el español cometiera un error no forzado mostrando cansancio de nuevo, era 4-0 para Zverev y básicamente punto de partido. Con su duodécimo ace, se puso con una ventaja de 5-0 y a uno de la victoria, que selló con tres puntos de partido en una victoria épica.