En el encuentro que enfrentaba a
Christian Garín y
Nuno Borges en los cuartos de final del
Estoril Open, el árbitro decidió dar un punto al chileno de forma completamente surrealista, ya que el portugués no falló en ningún momento. Por si fuera poco, era un juego muy importante y un momento crucial del partido.
El número 112 del mundo se llevó el primer set por 6-2 en una gran exhibición de tenis, pero en el segundo set, Borges pareció organizar la remontada. El sexto juego del segundo set, al saque de Garin, duró 18 minutos y se jugaron 32 puntos, incluidos seis puntos de ruptura a favor del portugués.
Durante una de las oportunidades de punto de ruptura de Borges, una bola de Garin fue anulada por el público, pero su oponente continuó jugándola. En un principio, parecía un break para el jugador local, pero como el árbitro no pitó a tiempo, y a pesar de la intervención del supervisor del torneo, el punto se repitió y Garin logró evitar la crisis.
El segundo set terminó sin interrupciones por parte de ninguno de los dos equipos, y Garin sentenció el partido en el tie-break. Tras el partido, el chileno reflexionó sobre el incidente: "Él paró el punto. Yo también paré. No sé si es mi punto o si hay que repetirlo. Tengo que comprobarlo. Lo comprobaré más tarde". El ambiente se volvió loco después de eso y estoy muy orgulloso de mí mismo. Fue un poco molesto durante el partido".
Cristian Garín en Madrid 2021
Borges se mostró decepcionado por su eliminación y criticó la decisión del árbitro: "Abandoné la pista sin entender la decisión del árbitro. Sabe que se equivocó, no tenía sentido", declaró.
"Los puntos no deben pararse porque alguien del público grite. Sintió que algo venía de la multitud pero continuamos y falló. Garin me dijo que falló porque yo paré. No es culpa suya, pero tampoco queda bien en esta situación", añadió Borges.