En 2005, Roger Federer dominaba el tenis de los pies a la cabeza. Ya sumaba varios trofeos de Grand Slam e iba a seguir encadenándolos, especialmente en Wimbledon y el US Open, aunque también en el Open de Australia. Donde tendría más problemas es en Roland Garros, y es que un tal Rafael Nadal apareció en ese momento. La ex número 9 del mundo Andrea Petkovic ha hablado sobre ese momento en los últimos días, hablando de la retirada de la leyenda tras la Copa Davis.
En el momento del ascenso de Nadal a la cima del tenis, Federer era el rey indiscutible del Tour y el favorito del público. Desde que se hizo con el número 1 del mundo en 2004, el suizo ocupó la primera posición durante 237 semanas consecutivas hasta agosto de 2008, cuando Nadal le superó tras años de rivalidad.
Petkovic habla de cómo Nadal se ganó los corazones dentro y fuera de la pista
Con la retirada de Federer hace dos años, era sólo cuestión de tiempo que Nadalfue su ejemplo. A sus 38 años, el español se retira tras ganar 92 títulos ATP, 22 de ellos de Grand Slam, medallas de oro olímpicas en individuales y dobles, un título de Copa Davis y más de 200 semanas como número 1 del mundo. Sus dos últimas temporadas han sido duras, con poco tiempo en la pista, y su periplo concluye esta semana en Málaga.
"Rafael Nadal se ha despedido. Por fin, dirán algunos, pero yo me atrevería a decir que lo ha hecho de la única manera que sabía", escribió Andrea Petkovic en su blog: "Luchando hasta el último momento, hasta derramar la última gota de sudor, hasta aceptar las lágrimas y la sangre como parte del viaje, hasta que su cuerpo gritó con todas sus fuerzas: BASTA. Basta ya, déjame en paz. Encuentra la paz, déjame ir".
La alemana señaló que a menudo se olvidan los aspectos más difíciles del ascenso de Nadal. "Hoy en día, la gente olvida la adversidad a la que se enfrentó Rafa por parte del público. La gente adoraba a Roger y no podía imaginar a un rival tan peligroso como este chico de Manacor, cuya potente derecha abría la pista de un modo que se creía geométricamente imposible. Rafael Nadal no se rindió. Hizo lo suyo, siguió ganando, siguió derrotando a Roger, siguió derrotándole con gracia y humildad en su corazón".
"Y poco a poco empezó a gustarles. Cada vez le querían más. Al final, lo amaron. Con pasión. Por su decencia y su inglés entrecortado, por su vídeo musical en el que se enrolla con Shakira y por su humor, que empezó a brillar cuando mejoró su inglés", añadió Petkovic. "Sobre todo, le querían por su espíritu de lucha en la pista. Primero ganó títulos, luego se ganó el corazón de la gente que estaba dispuesta a odiarle".
La ex tenista también destacó que Nadal siempre fue consciente de que podía perder ante cualquier rival en cualquier momento, un miedo que alimentaba su espíritu competitivo. "Su mayor fuerza siempre fue que tenía miedo. Antes de cada partido, incluso en el decimocuarto año que ganó el Abierto de Francia, creía profunda y profundamente que perdería en primera ronda contra un clasificado. Eso le hacía correr más rápido, trabajar más duro, esforzarse más. De ahí viene la intensidad que aprendimos a amar".