Alexander Zverev, la estrella alemana del tenis, se encuentra a las puertas de un hito en su carrera al clasificarse para la final de
Roland Garros. Su victoria en semifinales contra el noruego Casper Ruud con un marcador de 2-6, 6-2, 6-4 y 6-2 le ha colocado en una posición envidiable para disputar el título contra
Carlos Alcaraz, el prodigio español. Este enfrentamiento no solo determinará al campeón de Roland Garros, sino que también podría ser el inicio de una nueva era en el tenis masculino, según
Rick Macci, exentrenador de Serena Williams.
Rick Macci, reconocido por su papel en el desarrollo de varios tenistas de élite, ha sugerido que Alexander Zverev tiene el potencial para formar parte de una nueva tríada de grandes en el tenis, junto a Carlos Alcaraz y
Jannik Sinner. En una publicación reciente en la plataforma de medios sociales X (anteriormente conocida como Twitter), Macci expresó su entusiasmo por el futuro del tenis masculino y el lugar que Zverev podría ocupar en él.
"Zverev puede hacer un cameo por el tercer puesto como miembro de los tres grandes con una victoria en la final. Sinner no va a ninguna parte tan decidido. Alcaraz no va a ninguna parte. Zverev sigue yendo a algún sitio por determinar", escribió Macci, destacando el potencial de estos jóvenes talentos para dominar el circuito en los próximos años.
La temporada 2024 ha sido impresionante para Zverev, quien ha demostrado una consistencia notable en su rendimiento. Comenzó el año llegando a las semifinales del Open de Australia, donde cayó ante el ruso Daniil Medvedev en un duro partido a cinco sets (5-7, 3-6, 7-6, 7-6, 6-3). Esta actuación fue seguida por otras destacadas participaciones en torneos de alto perfil.
En Los Cabos, Zverev llegó nuevamente a las semifinales, perdiendo ante el australiano Jordan Thompson en un ajustado encuentro (7-5, 4-6, 7-6). Su racha de semifinales continuó en Miami, donde fue derrotado por el búlgaro Grigor Dimitrov (6-4, 6-7, 6-4).
Sin embargo, su momento más brillante llegó justo antes de Roland Garros, cuando conquistó el título del Masters de Roma. En la final, venció al chileno Nicolas Jarry en sets corridos (6-4, 7-5), demostrando su habilidad y preparación para competir al más alto nivel.