El
Masters de Shanghai está siendo una auténtica guerra entre los jugadores y los árbitros. El episodio de Frances Tiafoe insultando al juez de silla tras su partido ha sido el caso más sonado, pero no se trata del único. Carlos Bernardes le apuntó a Flavio Cobolli un punto que ganó Stan Wawrinka en un juego importante, Stefanos Tsitsipas ha discutido con el colegiado, pidiendo incluos la intervención del supervisor... Y el último en sumarse a esa lista es
Novak Djokovic.
Aunque no tan locuaz como sus homólogos, no entendía por qué no se había impartido formación ni se había avisado de la norma entre puntos en cuanto al automatismo del cronómetro.
Durante su victoria por 6-3 y 6-2 sobre Roman Safiullin, recibió una violación de tiempo que le hizo perder su primer saque. Preguntó al árbitro la regla y se la explicaron, pero se quedó frustrado y golpeó fuera.
Djokovic se enfrentó a una penalización similar durante su primer partido contra Alex Michelsen, en el que el árbitro también explicó que estaba automatizada. Pero Djokovic no parece haber recibido el memorándum y también que había cambiado hace meses. El problema para el gran serbio es que apenas juega en el circuito, por lo que los cambios en las reglas tardan en llegar.
"Entiendo que no depende de ti. Pero el cambio de regla es increíble. Durante cuatro años hemos tenido una situación en la que no podemos coger la toalla. Los recogepelotas hacen lo que pueden, pero no están entrenados. Sin ni siquiera notificárselo a ningún jugador, empiezas con esta nueva regla. Es increíble, sinceramente", dijo Djokovic.
"Lo entiendo. Ustedes quieren acelerar el ritmo del partido de tenis. Pero al mismo tiempo tenemos que saber si empezamos la temporada así. No podemos cambiarlo a mitad de temporada".
Más tarde fingió sorpresa y confusión al afirmar que se había aplicado desde la temporada de hierba, por lo que es una norma que viene de lejos.