Andy Murray se metió en la final de la Aix-En-Provence, donde se enfrentará a Tommy Paul, y gracias a ello regresará al top 50.
Murray abandonó el Abierto de Madrid tras perder el primer partido que jugó allí. Perdió contra un jugador de menor ranking que pudo usar la condición en su contra. En condiciones mucho más lentas en Aix, Murray fue capaz de abrirse paso a un par de jugadores sólidos hasta la final, que es su primera final sobre tierra batida desde 2016.
La victoria también le permitirá regresar al top 50, lo cual es muy admirable teniendo en cuenta todo lo que pasó y lo duro que trabajó en los últimos dos meses para lograrlo. Este sería su primer trofeo desde 2019, cuando demostró ser mejor que todos los demás en Amberes. Se clasificará en el puesto 48 en el peor de los casos y posiblemente incluso mejor si gana.