Carlos Alcaraz se confiesa tras meterse en cuartos de Montecarlo: "Me he dado cuenta de que..."

ATP
viernes, 11 abril 2025 en 8:54
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Carlos Alcaraz ha conseguido meterse en los cuartos de final del Masters 1000 de Montecarlo. El español ha vencido en dos sets a Daniel Altmaier, y se enfrentará a Arthur Fils por un hueco en semifinales.

El triunfo dejó sensaciones claras: fue una batalla exigente desde el primer punto, con largos intercambios y un ritmo altísimo. “Sobre todo en el primer set fue una guerra”, admite. El nivel, altísimo por parte de ambos, obligó a mantenerse completamente enfocado. La clave, explica, estuvo en cerrar ese parcial inicial desplegando un tenis agresivo y certero:

“Ahí empecé a golpear muy bien la bola. Eso me permitió arrancar el segundo set con más calma, más tranquilo, sintiéndome yo mismo, soltando las dejadas, buscando la derecha siempre que podía”. El mérito del rival, Daniel Altmaier, tampoco pasó desapercibido: “Está jugando a un gran nivel”.

La progresión es evidente. Comparado con su estreno ante Cerúndolo, su desempeño actual refleja mayor solidez y claridad en su propuesta. “Sí, me siento más cómodo. En tierra necesitas rodaje, ritmo, partidos. Desde la primera ronda entendí que tenía que volver a ser yo mismo. Solo así disfruto realmente jugando”, señala. Y aunque reconoce que su juego agresivo no es su único recurso, es consciente de que conectar con su identidad en pista es lo que lo hace peligroso. “Con cada partido me voy sintiendo mejor, y cuanto más tiempo pase en cancha, más creceré”.

La confesión de Carlos Alcaraz

Una de las claves de esta evolución está en su cambio de enfoque. Durante meses, confiesa, se dejó llevar por las estadísticas, los números y el peso del ranking. Ahora, el chip es otro. “Me he dado cuenta de que eso no es lo importante. Lo que amo es jugar, competir, pegar buenos tiros, dejarlo todo en la pista. He decidido olvidarme de todo lo demás y simplemente disfrutar del tenis”.

Otro aspecto en el que sigue puliendo detalles es el servicio, una herramienta que, aunque no decisiva en tierra batida como en otras superficies, sigue siendo fundamental. “Creo que está mejorando. En arcilla es complicado juzgarlo porque casi siempre se juega el punto, incluso con un buen saque. Estoy probando si me convienen más los porcentajes o buscar más potencia. Lo importante es que me estoy sintiendo muy bien con el saque ahora mismo, y espero seguir en esa línea”.

El próximo desafío tiene nombre y apellido: Arthur Fils. Rival inédito, talento emergente y una cita que promete espectáculo. “Será la primera vez que nos enfrentemos. Está jugando de maravilla, creo que es el único que ha llegado a cuartos en todos los Masters 1000 de este año. Su nivel es altísimo. Vi algo de su partido de hoy y fue espectacular. No le tengo miedo, eso seguro. Voy a hacer mi juego, a presionarlo desde el inicio. Tengo muchas ganas de enfrentarme a él. Será un partido duro, pero muy lindo de jugar… y también de ver”.

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