Después de un espantoso registro en el Cara a Cara,
Jannik Sinner dio la vuelta a la tortilla en el
China Open en Pekín, sellando finalmente la victoria sobre
Daniil Medvedev por 7-6(2), 7-6(2).
Los limpios golpes de fondo fueron divinos por parte de Sinner, que no pareció inmutarse por su tórrido historial contra el ruso.
En la ceremonia posterior al partido bromeó de forma similar a la de Miami, cuando se burló de su pobre historial en tierra batida.
Esta vez, fue su pobre trayectoria la que cobró protagonismo y agradeció a Medvedev que le dejara ganar un partido.
"Daniil, gracias por dejarme ganar al menos un partido", bromeó Sinner durante la ceremonia de entrega de trofeos.
"Hemos librado batallas muy duras, sobre todo este año. Gracias por hacer de mí un jugador mucho mejor. He entrenado mucho para vencerte. Mi equipo está trabajando mucho. Muchas gracias y es especial compartir este momento contigo".
