Ivan Ljubicic, antiguo entrenador de Roger Federer, habló recientemente de los retos a los que se enfrentó el suizo contra Rafael Nadal en Roland Garros. El croata se unió al equipo de Federer en 2015 tras la marcha de Stefan Edberg, y desempeñó un papel crucial en el camino de Federer hacia sus tres últimos títulos de Grand Slam antes de su retirada en 2022.
En una entrevista con Eurosport, Ljubicic compartió la dura realidad de jugar contra Nadal en tierra batida: "Jugar contra Rafa en la Philippe-Chatrier es difícil. Es una experiencia traumática", dijo.
Federer llegó a cinco finales de Roland Garros, pero sólo consiguió un título en 2009, al derrotar a Robin Soderling, que había derrotado a Nadal en la cuarta ronda. En esas cinco finales, Federer sólo ganó tres sets frente a los doce de Nadal, incluida la dolorosa derrota de 2008, que sigue siendo uno de los partidos más unilaterales de su rivalidad.
Ese año, Nadal se adjudicó su cuarto Roland Garros consecutivo con una decisiva victoria sobre Federer por 6-1, 6-3 y 6-0. Apenas unos meses después, Nadal ascendió al número 1 del mundo por primera vez en su carrera.
"Me sorprendió que Nadal anunciara su retirada", comentó Ljubicic. "Evidentemente puedo entender por qué, pero eso no es lo importante. Pero para mí, Rafa Nadal es Roland Garros, y es difícil aceptar que no vaya a jugarlo".
"Los campeones así juegan para ganar, no sólo para participar. Y eso es algo que hemos llegado a entender cuando hemos visto al hombre con 21 títulos de Grand Slam (en realidad 22) luchando en estos últimos meses. No sé exactamente cuál es su nivel de juego o su condición física, pero no es a lo que estamos acostumbrados, y no le permite competir a un nivel muy alto".
Ljubicic también destacó el dominio de Federer en hierba, comparándolo con la supremacía de Nadal en tierra batida. Federer terminó su carrera con ocho títulos de Wimbledon, récord del torneo.
"Nunca he jugado contra Federer en Wimbledon, pero lo he hecho muchas veces, y era complicado porque él tenía todas las soluciones", continuó Ljubicic. "El tenis de Rafa es tácticamente bastante sencillo, pero es imposible de manejar, especialmente con su topspin. Pero Roger siempre tenía soluciones diferentes, y para mí, tácticamente, era muy complicado".