Pese a la fama y la riqueza acumuladas como una de las estrellas actuales del circuito,
Carlos Alcaraz se mantiene fiel a sus raíces. Ha admitido que no tiene intención de independizarse y que seguirá viviendo con su familia.
El español ha firmado un año frenético en el Tour, compitiendo de forma regular en los grandes eventos y abandonándolos a menudo con el trofeo. Ahora reside en Turín junto a los ocho mejores del mundo que se disputan las ATP Finals. Es un torneo que Alcaraz desea conquistar, uno de los grandes títulos que aún se le resiste.
Alcaraz se queda en casa de sus padres
Solo este año, Alcaraz ha ganado la impresionante cifra de 16,5 millones de dólares. Tiene la oportunidad de superar la barrera de los 20 millones si se proclama campeón invicto de las ATP Finals esta semana, igualando la gesta de su rival Jannik Sinner el año pasado. Sin embargo, este botín no será motivo suficiente para mudarse.
“De momento no, estoy muy a gusto en casa con mis padres y mis hermanos”, explicó a
Mundo Deportivo, pese a que otros miembros de la familia ya se han independizado.
“Es verdad que mi hermano mayor (Álvaro) ya se ha ido. Pero como paso muy poco tiempo en casa, cuando vuelvo me gusta estar con mis padres y mis hermanos. Además, mi madre me echa de menos y todavía me quiere en casa.”
En casa, Alcaraz convive con sus padres y sus tres hermanos. Bajo los focos, siempre ha dejado claro su deseo de estar cerca de su familia. Suele viajar con su hermano mayor, Alvaro, y en el pasado ha mostrado su apoyo a su hermano pequeño, Jamie, que progresa como un tenista muy sólido.
También es el lugar al que acude para sentirse normal tras competir, y a menudo ganar, en los grandes escenarios del circuito. “Cuando llego a casa, soy el mismo Carlos de siempre. No el tenista ni el número uno ni lo que sea. Soy el de siempre”, comentó Alcaraz.
Ni siquiera su estatus de número uno le libra de algún tirón de orejas de sus padres. “En casa de mis padres siempre hay normas y quieren lo mejor para mí”, admitió. “Muchas veces ya no me ponen toque de queda, pero sí me dicen que no llegue tarde, que haga esto, que haga lo otro. Y cuando no hago lo que debo, me echan la bronca.”
Alcaraz hace orgullosa a su familia en Turín
Aunque pasa más tiempo lejos de los suyos, la temporada entra en su recta final. Queda el desenlace de las ATP Finals y después representar a España en las Finales de la Copa Davis en 2025. Una vez concluido, el murciano podrá descansar unas semanas antes de que el tenis vuelva a ponerse en marcha. Falta poco, pero entre medias se jugará mucho tenis; al menos, eso es lo que espera Alcaraz.
Ha iniciado su tercera participación en las ATP Finals con dos resultados positivos. Superó a Alex de Minaur en su debut y luego tuvo que sacar su mejor tenis para derrotar a un Taylor Fritz de altísimo nivel. La derrota esta tarde del estadounidense ante de Minaur ha certificado la clasificación de Alcaraz desde la fase de grupos, ya mejorando su discreta campaña de 2024. Aun así, aspira a amarrar el primer puesto. Su último partido será ante Lorenzo Musetti. Mientras el italiano necesita ganar para avanzar, el español de 22 años apunta al liderato. Un triunfo también haría inalcanzable a Jannik Sinner en la lucha por el número uno del mundo. Sería la primera vez que termina el año como número uno desde 2022.